Los inversores ingleses que gestionaron el CD San Roque durante una temporada y media, hasta el pasado mayo, generaron una deuda de 700.000 euros, la mayor parte por impagos a la Seguridad Social y Hacienda, según ha denunciado hoy el presidente de la entidad, Rafael Mendoza.
En conferencia de prensa, Mendoza ha confirmado hoy las cifras de deuda que tiene el club tras la gestión del grupo inversor inglés que se hizo con la mayoría de sus acciones en el 2010, además de concretar que la mayor marte de la deuda, 400.000 euros, corresponde a impagos a Hacienda y a la Seguridad Social.
Rafael Mendoza ha pedido al Ayuntamiento de Lepe, que ahora tiene la mayoría de las acciones, que estudie si tiene que presentar una querella contra los inversores, que mantienen un paquete de acciones en torno al 45 por ciento, tras perder la mayoría el 30 de junio al no pagar la deuda de la plantilla ante la AFE, y hacerse cargo de la misma un grupo de empresarios locales.
"Es inconcebible que se haya generado esta deuda en menos de dos temporadas, y a nadie se le escapa quienes son los responsables de este desaguisado monumental", ha dicho el presidente del club, que ha recordado que, con fecha 31 de agosto, los ingleses ya no deberían tener la mayoría de las acciones del club, sin que aún se haya firmado la escritura que da fe de ello, por lo que ha apelado al ayuntamiento a que acelere las gestiones.
Además, ha entendido que la solución para la economía del club sería que hubiese un comprador, "ya que está muy bien situado deportivamente", aunque con la deuda actual ha entendido que los posibles compradores se retraigan, de forma que, según ha señalado, lo más probable es que los actuales dirigentes sean los que terminen, al menos, la actual temporada.
La situación en la que los ingleses han dejado el club es tal, según Mendoza, que cada semana "es casi imposible cubrir el presupuesto para poder viajar" -como esta semana a La Roda (Albacete)-, además de que la plantilla del año pasado, aunque existían algunos contratos en vigor, era inasumible en su continuidad para los actuales dirigentes.