A alguna la hacían trabajar em un club de Torremolinos de lunes a domingo durante diez horas y se quedaban con el dinero, situación que duró casi un año.
Cuatro personas serán juzgadas en la Audiencia Provincial de Málaga por presuntamente obligar a mujeres de Nigeria a ejercer la prostitución en España tras practicarlas rituales de vudú o amenazarlas con hacer daño a sus familiares.
Los procesados, dos hombres y dos mujeres, están acusados de delitos relacionados con la trata de seres humanos, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, así como de blanqueo de capitales, según el escrito acusatorio del fiscal, al que ha tenido acceso EFE.
Los procesados presuntamente formaban parte de una organización que, junto a otros residentes en Nigeria, facilitaban a ciudadanas de dicho país documentación y recursos para trasladarse a España y, una vez aquí eran explotadas sexualmente, en concreto por las dos mujeres.
Uno de los acusados era el encargado de trasladar el dinero conseguido de la prostitución a Nigeria y el otro facilitaba a las chicas la petición de asilo con la que conseguían la documentación precisa para quedarse en España.
Algunos de estos hechos fueron cometidos entre 2015 y 2017, según se precisa en el escrito fiscal, y según la acusación el encargado de trasladar el dinero obtenido de la prostitución hasta Nigeria llevaba el dinero en metálico, y consta que en un plazo de seis años efectuó un total de 118 viajes en avión a su país.
En una ocasión, para efectuar la petición de asilo obligaron a decir a una de las víctimas que estaba amenazada por el grupo terrorista Boko Haram y luego le cobraron por dichos servicios 250 euros.
A otras mujeres les ofrecieron venir a Europa con la promesa de que ganarían mucho dinero ejerciendo la prostitución y que una vez en España les ayudarían a buscar otro tipo de trabajo, además les hacían rituales de vudú y les advertían de que habían contraído una deuda de 55.000 euros.
A una de ellas le ofrecieron el viaje y trabajo pero contrajo una deuda con los acusados de 50.000 euros, que tuvo que pagar ejerciendo la prostitución bajo amenazas de hacerle daño a sus familias con prácticas de vudú.
El juicio está previsto que se celebre en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Málaga el próximo 18 de abril y varias de las afectadas comparecerán en la vista oral como testigos protegidos, según han informado a EFE fuentes judiciales.
En el banquillo de los acusados también se sentarán dos personas mas, un matrimonio, que presuntamente tras contactar con uno de los otros procesados y utilizar sus servicios acogieron a una joven a la que supuestamente explotaban sexualmente.
Los procesados según los delitos y el grado de implicación de cada uno de ellos se enfrentan a penas que oscilan entre 67 años de prisión a nueve meses de cárcel.
A esta última joven que se quedó con el matrimonio le ofrecieron trasladarla a Europa vía Libia e Italia para trabajar y ganar dinero y así ayudar a su familia, sin que le indicaran que tendría que prostituirse ni que iba a contraer una deuda.
Una vez emprendido el viaje fue retenida en Libia, pero tras contactar con la persona que la iba a traer a España, ésta le dijo que había contraído una deuda y que le había hecho vudú a su padre para que muriese si no le pagaba.
Tras cruzar el mediterráneo en patera, llegó a Italia en 2017 desde donde se la trasladó a Málaga en un camión y la obligaron a ejercer la prostitución en un club de Torremolinos (Málaga), donde la hacían trabajar de lunes a domingo durante diez horas y se quedaban con el dinero, situación que duró casi un año.