Un nuevo espacio expositivo y multidisciplinar está a punto de ver la luz, en pleno centro de Sevilla. Se trata de Nave Nodriza, ubicado en unas antiguas caballerizas de la céntrica calle Bustos Tavera 26. Mañana, jueves 13 de noviembre, se inauguraró, oficialmente, con una triple muestra, según anunció a Viva Sevilla, Valentín Romero, uno de sus responsables.
La exposición colectiva de la Nave Nodriza está compuesta por 0/0/0 El tiempo de mi felicidad, de Margarita López Morales; Power Pop de Valentaine Romero; y Las Flores de Isabel de Isabel López Boza, Isa La Chiquita. Estará abierta al público hasta el 30 de diciembre y consta de cerca de 50 obras, entre fotografías, realistas con reminiscencias abstractas en blanco y negro, acrílicos sobre madera y muebles restaurados. Los tres artistas ofrecerán al público su peculiar visión de la deseada felicidad, desde momentos vitales diferentes y cruciales.”
El acercamiento creativo a esta entidad tan huidiza, la felicidad, parte de la plena juventud de Margarita López Morales, fotógrafa y directora de fotografía de 24 años; Valentaine Romero, artista pop, montador escenográfico de cine y teatro, que realiza pintura artística de interiorismo y collage, que nos ofrecerá una mirada pop de la vida cotidiana desde sus 51 años; e Isabel López Boza, artista de 85 años, enferma de párkinson, que nos acerca a su felicidad pintando múltiples flores, que llenan de color este mundo sediento de experiencias placenteras.
Valentín Romero, al ser cuestionado por cómo describiría a La Nave Nodriza, contestó: “Nos complace comunicaros que después de muchos años viajando por el espacio y gracias a la recogida de basura galáctica, hemos construido nuestra propia Nave Nodriza”.
“El espacio de la Nave, de grandes dimensiones, -continúa Romero- está a la disposición de cualquiera que pretenda utilizarlo para dar a conocer sus creaciones, como lugar de encuentro y reuniones, para desarrollar actividades galácticas o perderte en su inmenso espacio. Los motores artísticos de la Nave ya están en marcha y en sus módulos de creación ya puedes encontrar graffitis, cuadros y muebles restaurados”.
Una nueva apuesta privada para dar cabida a los innumerables artistas que empiezan en este , cada vez mas complicado mundo, o que, ya consagrados, necesitan espacios para exponer sus trabajos, en condiciones favorables o al menos no demasiado gravosas.
Después del arranque y de sentar las bases de una filosofía de trabajo novedosa y plena de ilusión, habrá que trabajar duro para rentabilizar esta idea de negocio. Muchos artistas sevillanos se beneficiaran de esta propuesta y el público en general tendrá una nueva alternativa para disfrutar del arte, en sus múltiples formas, en Sevilla.
