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Sevilla

Placeros de Sevilla Este sufren la falta de aire acondicionado por el conflicto con una gran superficie

Ello repercute en puestos como la carnicería, que ha tenido que cerrar porque su producto se degradaba por el calor

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El ente gestor del mercado de abastos de Sevilla Este, ubicado en el cruce de las avenidas Emilio Lemos y Médicos Mundi de la capital hispalense, ha criticado la situación en la que actualmente desempeñan su labor los placeros del recinto, que deben trabajar sin climatización por el impago de las cuotas a la empresa suministradora derivado de un conflicto con una gran superficie comercial.

   El abogado gestor que representa los intereses de la cooperativa promotora, Francisco Tejado, ha explicado a Europa Press que las "irregularidades" en el abono de los gastos por parte de una cadena andaluza de supermercados, que tiene establecido un centro comercial en esta sede y al que los comerciantes acusan de "querer quedarse con el mercado a precio de saldo", han derivado en esta situación.

   "Se ha llevado a cabo una política de acoso y derribo en base a la idea obsesiva y paranoica de quedarse con el mercado", ha expuesto Tejado, que ha dado cuenta de reuniones mantenidas con esta gran superficie en la cual "se quiso hacer ver que se había llevado a cabo una gran inversión, pero también hay que contar con una cesión a coste cero de estas grandes áreas del mercado".

   Ante los impagos y la "política de economía de guerra" acordada por el Consejo Rector el pasado mes de febrero, el letrado ha dado cuenta de los problemas para acometer el abono de una partida de unos 83.000 euros que debían destinarse a la empresa suministradora. "Se nos propuso un acuerdo sobre la base de adelantar 30.000 euros para pagar el resto en un año", ha indicado Tejado, que ha añadido que, ante la imposibilidad de llegar a este extremo, se procedió al corte de la climatización en las zonas comunes.

   "Ahora, con la bajada de temperaturas, están algo más aliviados, pero los pasados días de calor eran insufribles, pasándolo peor que si estuviesen en Kenia", ha asegurado el letrado, agregando que ello ha repercutido directamente sobre algunos puestos, como el de carnicería, que ha tenido que cerrar porque su producto se degradaba por el calor, o en pescadería, "donde han tenido que poner diez veces más hielo de lo acostumbrado". "No entran ni las moscas", ha ejemplificado.

   Tejado ha apostillado que para los próximos días están previstas reuniones con los grupos políticos y la propia superficie comercial para tratar de desbloquear el asunto, que ya se ha enconado ante la aparición, primero, de pintadas, y posteriormente de carteles alusivos a la problemática.

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