Medio centenar de personas, tanto amigos como comprometidos con el caso, encabezados por
José Antonio Casanueva, el abuelo materno de Marta del Castillo, han recordado este martes a la joven sevillana, asesinada aquel
24 de enero de 2009,
un crimen que justo ahora cumple catorce años.
Con una gran pancarta de
“Marta. España no te olvida, la justicia sí”, fotografías de la víctima y un ramo de flores, la
marcha silenciosa ha comenzado a las 11 de la mañana desde el acceso a los Jardines Murillo y ha concluido en
la puerta de los juzgados, algo que, a palabras del abuelo, ha tenido una intención clara:
“remover conciencias y que los jueces vean lo que pide el pueblo”.
En esta línea, Casanueva ha solicitado a viva voz que
“de una vez por todas se haga justicia” recordando que hace meses fue declarada la “conclusión de la instrucción” y se
archivó la pieza judicial separada correspondiente a la búsqueda del cuerpo, a pesar de que la Fiscalía precisaba que
la búsqueda sigue abierta hasta tener algún resultado.
Con ello, el abuelo de Marta, a sus 84 años, ha asegurado que la familia de la víctima,
cuyo cadáver sigue sin ser localizado, lleva
“14 años sufriendo, 14 años de martirio” y padeciendo
“noches y noches en vela”.
A
Miguel Carcaño, el único condenado por el asesinato,
le quedan siete años de cárcel de los 21 que le caían en 2009. Una pena que terminará de cumplir pero
sin despejar la incógnita de dónde está el cuerpo de la joven. Ante ello, José Antonio Casanueva ha pedido “a los asesinos” de su nieta, refiriéndose a los cinco implicados en el caso, que
“digan dónde está su cuerpo para poder cerrar este capítulo” que, como ha insistido, está “matando en vida a toda la familia de Marta”.
“La mano negra”
El abuelo de Marta ha asegurado que “los cinco implicados saben dónde está el cuerpo de Marta”, a lo que ha vuelto a recordar su idea de que en el caso pesa la acción de una
“mano negra que pone impedimentos” a la localización del cuerpo y a que se cumplan los intereses de la familia de la víctima. Eso sí, Casanueva ha asegurado que
la familia de la víctima va a continuar con sus acciones judiciales y la búsqueda del cadáver, recordando que, en su caso,
morirá buscando a su nieta, “no voy a parar hasta que Dios me lleve”, ha asegurado.
Recordemos que el Juzgado de Instrucción número cuatro de Sevilla, en el marco de la pieza correspondiente a la búsqueda del cadáver de Marta del Castillo, había atendido una petición de la familia para que dicha línea de investigación abarcase los
"datos crudos" de teléfonos móviles relacionados con los hechos.
En ese marco, el pasado 21 de septiembre de 2022, el Juzgado emitía un auto dando cuenta de los
"informes emitidos por las operadoras" de telefonía móvil respecto a los terminales de
Miguel Carcaño y Marta del Castillo, para su
traslado al perito designado a fin de que el mismo "presente informe, acordándose el archivo de esta pieza en tanto se remita" dicho informe.
También la Audencia
La Sección Tercera de la Audiencia, de su lado, emitía un auto el pasado 26 de octubre de 2022,
desestimando un recurso de apelación de la familia de la víctima, contra un auto previo emitido en febrero de 2022 autorizando a un perito a acceder a los "datos telefónicos crudos" de los teléfonos móviles con los que contaban a la fecha de los hechos Miguel Carcaño y Marta del Castillo; pero
excluyendo de dicha medida "el resto de terminales telefónicos", en alusión a los móviles de otras personas juzgadas por el crimen, como es el caso del hermano de Carcaño,
Francisco Javier Delgado, su novia
María García Mendaro, el amigo de
Carcaño Samuel Benítez o el joven
Francisco Javier García, conocido como
El Cuco.
Los tres primeros, recordémoslo, fueron
absueltos tras el juicio celebrado en 2011 contra los adultos acusados por este crimen, mientras en el caso del Cuco, fue condenado por un Juzgado de Menores por
encubrir el asesinato perpetrado por Carcaño y, ya en 2022, el Juzgado de lo Penal número siete le condenaba junto a su madre a
dos años de cárcel por un delito de falso testimonio, en sus comparecencias como testigos en el citado juicio celebrado en 2011 contra los adultos.
La Sección Tercera de la Audiencia
desestima el recurso de apelación de los padres de la víctima "al ser de aplicación la nueva doctrina del Tribunal Supremo (...), que considera precluido el plazo de investigación
sin que previamente se hubiera acordado su prórroga, al no haber sido interesado por las acusaciones dicho pronunciamiento, efecto que debe apreciarse en las presentes diligencias, que se iniciaron en fecha de 9 de noviembre de 2009" como
"pieza separada para continuar las gestiones de búsqueda y localización del cuerpo" de la víctima,
"sin que posteriormente se haya dictado resolución de prórroga del plazo de instrucción".
Así, el tribunal desestimaba el recurso de apelación de la familia de la víctima y con ello confirmaba la denegación de "la práctica de nuevas diligencias de prueba", en este auto contra el que no cabía "recurso ordinario alguno", mientras la decisión de archivo del Juzgado de Instrucción número cuatro sí era susceptible de recurso de reforma.
No obstante, recientemente la Fiscalía formalizaba un escrito asegurando que
"la pieza siempre permanecerá abierta hasta que aparezca el cuerpo, sin límite temporal alguno", tras lo cual solicitaba a la autoridad judicial que especifique dicho extremo en su siguiente resolución.