Dejó los escenarios en 2013 para dedicarse en cuerpo y alma a lo que él definía como un "mandato divino", la elaboración de una momunental enciclopedia
El guitarrista Manolo Sanlúcar, que ha fallecido este sábado a los 78 años, dejó los escenarios en 2013 para dedicarse en cuerpo y alma a lo que él definía como un "mandato divino", la elaboración de una momunental enciclopedia audiovisual del flamenco, que le llevó quince años de su vida.
En su casa de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), Manuel Muñoz Alcón dio por concluido el pasado año esta enciclopedia que lleva por título "La Guitarra Flamenca, Manolo Sanlúcar" y que se compone de un primer libro, titulado "Andalucía: La otra historia", dividido en tres volúmenes; de un segundo libro, "La escuela", compuesto por otros dos volúmenes; y de doce DVD en los que, con la participación de más de 40 artistas, desentraña los misterios del sistema musical que encierran los géneros y palos flamencos.
En una entrevista que concedió a Efe en noviembre de 2021, Sanlúcar explicaba que para hacer la enciclopedia había dejado los escenarios e incluso hacía siete años que no tocaba la guitarra en privado y confesaba: "Yo siempre he procurado estar y hacer aquello que necesita mi cultura. No puedo quejarme de nada, no puedo quejarme de trabajar mucho, no puedo quejarme de, a veces, no elegir lo que yo necesito".
La Diputación Provincial de Cádiz y el Ayuntamiento de Sanlúcar de Barrameda llegaron a un acuerdo para publicar esta obra, en la que la guitarra actúa como hilo conductor.
Para Sanlúcar, la guitarra flamenca, con guitarristas de su generación como Paco de Lucía, dio un "salto de gigante" y se hizo "mucho más académica", por lo que precisaba de una "explicación más ortodoxa".
"Al nivel que estamos ya precisa de una explicación más ortodoxa. A mí me ha tocado acudir a esa tarea porque en el flamenco somos muy pocos los que tenemos formación académica", "el flamenco muestra un desprecio excesivo de la música académica", apuntaba.
Para elaborar la enciclopedia, Sanlúcar investigó multitud de particularidades del flamenco, un arte popular y espontáneo pero en el que él buscó las reglas de un sistema musical milenario para documentarlo y salvaguardarlo.
En esa entrevista, cuando estaba a punto de cumplir 78 años, Manolo Sanlúcar dijo: "Yo no sé descansar. Me quedan muchas cosas por hacer. Me voy a dejar un montón de cosas por hacer porque todos mis proyectos son asuntos muy laboriosos, tocan puntos esenciales de la música".