Todos los meses que baja el paro salen a los medios de comunicación a apuntarse el tanto y los meses en los que sube el paro se consuelan con que en otras poblaciones están. Es la dinámica de los gobiernos municipales a los que se les llena la boca hablando de las medidas arbitradas para estimular la creación de empresas y promover el “emprendimiento”.

En el otro lado de la balanza están los futuros empresarios que se estrellan contra la burocracia municipal y en el caso de San Fernando a veces terminan llevándose el negocio al pueblo vecino o aquellos que han cumplido todos los trámites y no pueden empezar a trabajar porque falta un papel. El último papel.

Ese es el caso de Óscar Aragón, el joven que tuvo una idea hace casi tres años y que ha puesto en evidencia la lentitud del Ayuntamiento para promover empleo y además, le ineficacia de algunas actuaciones como poner tres quioscos cuando no había demanda o los demandantes no podrían acceder a los requisitos económicos exigidos para su explotación.

El primer papel -debajo de este párrafo- es del pliego de los quioscos en el se dice que una vez que el adjudicatario Óscar Aragón en este caso entregue la fianza, el Ayuntamiento tiene cinco dias hábiles para decretar la adjudicación formalmente.



El segundo papel -debajo de este párrafo- es la entrega de la fianza. Este periódico ha preguntado a Óscar Aragón si el procedimiento se ha completado y éste responde que en el propio Ayuntamiento le han dicho que sí.



Diez días después de concluido el trámite el Ayuntamiento sigue sin permitir que Aragón comience a trabajar en el quiosco que le ha costado dos años y medio presentándose a modo de protesta en todos los actos públicos, pidiendo amparo al Defensor del Pueblo y luego buscando el dinero para acceder a la adjudicación, en cuya consecución han participado muchos ciudadanos de San Fernando a través de una colecta organizada por La otra cara de La Isla.

El Ayuntamiento una vez más incumple sus propios plazos, dice Aragón, mientras en la misma jornada de hoy hace las cuentas de la cantidad de parados menos que tiene La Isla desde 2015 hasta ahora. Eso sí, no cuentan con el millar de habitantes menos que tiene la ciudad porque se han ido al no encontrar trabajo ni la bajada de demandantes de empleo en el Servicio Andaluz de Empleo porque se han cansado.

Óscar Aragón podría ser un desempleado menos, pero ya lleva diez días perdidos. Habrá quien piense que diez días no es nada. Que le pregunten a un parado.