No habrá milagro y por supuesto, la playa no estará en Semana Santa como se pedía en la polémica política de cada año y estará en condiciones sin muchas exigencias en verano. O al menos este último plazo, se espera porque es prácticamente lo único que tiene La Isla para protegerse de las calores. Ni piscinas.
No sólo no habrá milagro sino que hay muchos interrogantes que resolver después de que desde el Gobierno de la Nación y de la Junta -aunque no sea competente, que dijo en un comunicado- aseguraran que se volcarán con el litoral andaluz afectado. Más que nada porque el turismo está en peligro y con él todo lo demás.
Primero habrá que ver qué dinero se pone sobre la mesa y luego establecer prioridades. ¿En función de qué? Obviamente del impacto de cada una de las playas afectadas en la economía de sus zonas de influencia.
O dicho de otra forma, no estaría de más pensar que la inversión en Matalacañas será superior y prioritaria a la que se haga en La Isla. Y eso lo saben los políticos de cada de las localidades afectadas, incluidos los de San Fernando, aunque todos barrerán para casa “porque es nuestra obligación”.
En San Fernando se ha hecho un balance de daños en el que se incluye todo lo que se ha llevado por delante el temporal y cuya cuantía asciende a cuatro millones de euros. Ocho veces más que lo calculado en Cádiz capital porque se incluyen daños en prácticamente todo el ecosistema y en sistema, en lo natural y en los equipamientos.
Por ahora se le ha visto el pelo a la directora general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Raquel Orts; al subdelegado del gobierno en Cádiz, Agustín Muñoz y al jefe de Demarcación de Costas en la provincia, Patricio Poullet.
Estuvieron con los responsables municipales con la alcaldesa, Patricia Cavada, al frente en una de las paradas de la responsable del ministerio por toda la provincia.
Desde la Junta de Andalucía, además, se ha asegurado que van a arrimar el hombro auque los daños se han producido en el Dominio Público Marítimo Terrestre y en los equipamientos municipales.
Y desde el Ayuntamiento se ha echado el freno a lo que se estaba haciendo para comenzar la temporada de verano, porque los estragos de Emma han coincidido con la publicación en el Boletín Oficial de la Provincia del anuncio de la convocatoria de la licitación para la adjudicación del contrato de montaje, mantenimiento y desmontaje y almacenamiento de las infraestructuras de playas. Más dinero El montante máximo de 173.974,93 euros que aparece en el pliego de condiciones va a ser al alza y lo importante, el procedimiento administrativo se puede retrasar con todo lo que implica su realmente quieren que alguien quiera adjudicarse el contrato en las condiciones en las que se encuentra la playa.
Y es que no es sólo se han producido daños en el sistema dunar que se ha comido literalmente la mar o en el arbolado o en las vuelta afuera. Es que ha arrancado todo el saneamiento de la playa, el poco que se permite, lo que supone una barrera para la instalación de los servicios. Incluidos los básicos.
El temporal, a estas fechas y según las previsiones, no termina de pasar y los operarios municipales a todo lo más que han llegado ha sido a retirar aquellos restos de maderas destrozadas que pudieran dañar a las personas que se acercan a la playa, da igual que el acceso esté cortado por la Policía Local.
¿Se podrá ir a la playa este verano? Evidentemente sí, lo mismo que se va en invierno. ¿Estarán todos los servicios funcionando? Posiblemente no, aunque ahí es cuando se verá la capacidad de gestión de este Gobierno y la colaboración del resto de fuerzas políticas para tomar medida que implican habilitar partidas no presupuestadas.
Habida cuenta de que el dinero del Gobierno de España no va a llegar mañana, no se sabe cuánto va a llegar y cuánto para cada uno y los plazos se echan encima, el Ayuntamiento tendrá que actuar con carácter subsidiario y sobre todo, sin pérdidas (políticas) de tiempo.
Y no sólo las playas
Y es que el problema no se centra en las playas, lo que no es bueno para el reparto final, sino en infraestructuras tan importantes como las carreteras, por ejemplo, donde las personas de tienen que jugar la vida si no están en buenas condiciones, La presidenta de Diputación, Irene García, ha reclamado este martes al Gobierno estatal “un plan urgente para reparar los daños en el litoral de la provincia de Cádiz”. Una iniciativa que permita compensar los perjuicios causados por la sucesión de temporales pero que también contrarreste “la situación muy precaria” en la que se encontraba la franja marítima ya que “la Demarcación de Costas no ha llegado a ejecutar los programas previstos en las playas”.
Esta es una de las prioridades que planteará Irene García en la comisión que convocará la Delegación del Gobierno en Andalucía para coordinar las intervenciones dedicadas a la reparación de infraestructuras y servicios públicos. La presidenta de la Diputación de Cádiz también demandará la concreción de ayudas públicas, dirigidas a los Ayuntamientos, con una cuantía suficiente para subsanar los daños en el equipamiento urbano.
Diputación, según ha indicado Irene García, “está a disposición de los Ayuntamientos” para evaluar y cuantificar todo este deterioro en los municipios afectados. Un trabajo técnico que ya se está emprendiendo en las
carreteras de la red provincial. La sucesión de borrascas y temporales repercute con severidad en estas vías, localizadas en terrenos cercanos a cauces de ríos y arroyos o bien en zonas de escarpada orografía.
Estas comunicaciones también han sufrido “el abandono del anterior equipo de gobierno”, según ha referido Irene García. La presidenta de Diputación recuerda que, en el presente mandato corporativo, “se ha reforzado la plantilla de las
Brigadas de mantenimiento, además de incrementar sensiblemente el presupuesto dedicado a las carreteras provinciales”. Irene García también ha resaltado que, frente a esos datos, “en el anterior mandato hubo carreteras que estuvieron cerradas durante más de dos años”, en referencia a las vías Olvera-Coripe o al denominado Carril del Duende en Setenil. Para la presidenta de la Diputación gaditana las actuales circunstancias aportan más argumentos a favor de la causa que defienden las entidades locales ante el Gobierno de España: autorizar el libre destino del superávit para financiar inversiones.
Irene García, ha valorado el trabajo que está desempeñando el personal de las Brigadas de mantenimiento de las carreteras provinciales. En las últimas horas este esfuerzo ha permitido restablecer el tráfico en la
CA-3102, conocida como Macharnudo (en las proximidades de El Portal). El mapa del tráfico, en lo que respecta a la red provincial, presenta las siguientes incidencias: la CA-6101, de Nacimiento (en Bornos) está cerrada por acumulación de agua y barro; hay cortes intermitentes en la CA-4102 de Las Mesas a la altura de Torremelgarejo; la CA-6108, de Algar-Puerto Galis, está cortada en el kilómetro 8 por severos daños en el paso provisional que se acondicionó en dicha vía; también se ha producido un deslizamiento, con afección a canalización de desagüe, en el punto kilométrico 14 de la CA-9104 que enlaza Zahara de la Sierra y Grazalema; y se ha clausurado al tráfico un tramo de 11 kilómetros de la CA-9101, entre Olvera y Coripe, por el desbordamiento del río Guadalporcún.
La situación, en cuanto al tráfico, es de provisionalidad. Con las actuales previsiones meteorológicas las incidencias pueden variar constantemente, sobre todo en las vías cercanas a cauces o pasos inundables. Hace unos días el paso del temporal Enma dañó gravemente la calzada habilitada en el kilómetro 8 de la Algar-Puerto Galis. El personal de Diputación restableció el tráfico tras aplicar capas de zahorra; una solución efímera ya que una segunda borrasca –la denominada Félix- se ha llevado dichos áridos.