El Ayuntamiento de San Fernando tiene previsto en las próximas semanas eliminar las plazas de aparcamiento que actualmente existen tanto en la calle San Nicolás como en la calle San Diego y, en el caso de la primera de ellas, ya ha dejado de funcionar desde primeros de la pasada semana la Zona Azul, trasladándose dichas plazas de pago a la zona de León Herrero.
Una decisión que tiene su explicación en que ambos viales se consideran como ejes claves para darle fluidez al tráfico del centro de la ciudad, toda vez que en el futuro entre en funcionamiento el tren-tranvía. A ello hay que unir que servirán para unir la zona oeste de la ciudad con la zona este de manera lineal.
En las condiciones actuales resulta poco probable que esa fluidez que se pretende dar al tráfico desde el Gobierno municipal pueda convertirse en una realidad, sobre todo en la calle San Nicolás donde el paso de vehículos es bastante limitado debido a la estrechez con la que cuenta debido a las plazas de aparcamiento.
Incluso los de gran tonelaje no dudan en subirse a la acera peatonal para poder pasar, algo que también ha tenido sus efectos negativos en la solería, que está prácticamente destrozada en todo el perímetro de la calle desde San Marcos hasta la calle Real.
Además, la calle San Nicolás se convertirá también en un desahogo para los hoteles del centro de la ciudad, puesto que está previsto que se permita la subida de autobuses con clientes que tengan previsto pernoctar en alguno de ellos.
Más acera
El proyecto municipal, además de la eliminación de las plazas de estacionamiento, también contempla la ampliación de las aceras en la calle San Nicolás para posibilitar un mejor tránsito de las personas, ahora mismo limitado por la presencia de los cierros de los balcones de las viviendas.