El delegado municipal de Parques y Jardines, Francisco Márquez, ha respondido a la polémica suscitada en la barriada de San Cristóbal por la retirada de unas palmeras en una zona ajardinada, explicando que dicho espacio no cuenta con más de medio metro de profundidad, por lo que “pasados más de 12 años las palmeras han alcanzado una altura y grosor importante, por lo que en ese jardín estaban abocadas a morir o a que se cayeran”.

 

El edil ha señalado que, dado que iban a ser retiradas por tal motivo, desde la Delegación que dirige se ha optado por buscarles un nuevo emplazamiento, en este caso la Plaza de la Merced, aunque “desgraciadamente hay muchos lugares donde poder recuperarlas”, recordando que comenzó su etapa al frente de Parques y Jardines con la plaga del picudo rojo que ha afectado a gran cantidad de palmeras en la ciudad.

 

Márquez ha insistido en que dicha zona ajardinada se construyó sobre asfalto, en un espacio dedicado a contenedores, por lo que no tiene cabida arboleda de gran tamaño, como avala un informe técnico con fecha del 10 de mayo. Por ello lamenta el malestar ocasionado a los vecinos por el cariño que tenían a estas plantas que, según ha expresado, serán sustituidas por arbustos y flores “que sí tengan cabida en esa zona para que quede lo más decente posible, al igual que el resto de jardines de la ciudad”.