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Ronda

La goyesca se queda sin puerta grande

Paquirri, El Fandi y Talavante sólo lograron cortar una oreja en una corrida con un ganado que no dio el suficiente juego

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  • Goyesca -

La Real Maestranza de Caballería de Ronda ha acogido esta tarde la LVI Corrida Goyesca, que vivió su momento culmen con el paseíllo de los diestros Francisco Rivera Ordóñez Paquirri, David Fandila El Fandi y Alejandro Talavante, que se llevaron un trofeo cada uno.

Los momentos previos, con el cortejo que trasladaba a los diestros hasta el histórico coso en coches de caballo, volvió a ser centro de atención de rondeños y visitantes, entre los que no faltaron rostros famosos, aunque menos que en ediciones anteriores.

Francisco Rivera, que acudió a la cita con luto por la muerte de su tía Belén, se encontró en primer lugar con un Cuvillo de poca fuerza pero con suavidad en la embestida. Con el capote destacó la media verónica de cierre y, tras banderillear, realizó una faena de muleta "con despaciosidad".

Siempre en la zona de tablas, desarrolló una faena algo anodina, sin apreturas, y quiso agradar con los circulares invertidos en los compases finales de una actuación marcada por las cortas distancias y rubricada muy mal con los aceros, necesitando ocho pinchazos y un descabello.

Pudo pasear un trofeo en su segundo, otro toro que se dejó, cumplió en el caballo, y con el que estuvo vistoso de recibo a la verónica. Invitó a sus compañeros a banderillear, destacando el par de Talavante. Con la muleta volvió a desarrollar una labor que tampoco salió de la zona de tablas en la que aprovechó el poco recorrido del toro, colocándose bien y citando al pitón contrario para arrancarle los muletazos a regañadientes. Esta vez sí que estuvo acertado con el estoque, por lo que paseó con justicia el trofeo.

El primero del lote de 'El Fandi' fue un toro con muchas complicaciones, que fue acrecentando su mansedumbre conforme avanzaba la lidia. Así, primero se le coló con el capote por el pitón derecho, y luego por el izquierdo en un quite por chicuelinas. Justificó su actuación ante unas posibilidades inexistentes de lucimiento.

Su segundo se lastimó de salida y tuvo que ser apuntillado, por lo que salió un sobrero de este mismo hierro con el que se vivió el tercio de banderillas más vibrante en el que, tanto El Fandi como Paquirri (Talavante declinó el ofrecimiento), brillaron a buen nivel, rubricando con un  par que fue dividido entre ambos y clavado al violín.

La predisposición al triunfo era máxima cuando inició la faena de rodillas en tablas, pero la emoción fue decreciendo hasta que cerró con desplantes ante un toro ya muy rajado. También paseó un trofeo tras una estocada algo desprendido.

Completaba el cartel Alejandro Talavante, que paseó la primera oreja del festejo en el primero de su lote un astado al que recibió con el capote a pies juntos por delantales, continuando con una chicuelina y la media verónica. La faena de muleta se desarrolló en los medios, molestado por el viento por instantes, y resultando algo acelerada. En la fase final, ya en la zona de tablas, optó por las cercanías con manoletinas y pases por bajo que resultaron los más lucidos de su labor.

El último de la tarde fue un astado repetidor de inicio que terminó muy parado. Así, la actuación del matador extremeño fue de más a menos, comenzando con un estético inicio de faena con pases por ambos pitones, cambiados por el izquierdo. Sin embargo, todo se vino abajo conforme se agotaban las fuerzas del burel, por lo que se desvanecieron las opciones de que alguno de los diestros abriera la puerta grande del coso rondeño.

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