El pasado viernes comenzaron las obras de la primera fase del proyecto del Camino del Desfiladero del Tajo, que contempla la recuperación de los caminos desde la conocida como ‘Casa Manolillo’ hasta la base del puente.
Esta primera fase, que forma parte de un proyecto más ambicioso que permitirá la creación de un sendero turístico que recorrerá toda la garganta del monumento natural de Ronda, cuenta con un presupuesto de 400.000 euros y un plazo de ejecución de alrededor de tres meses.
En calidad de presidenta del Partido Popular, Maripaz Fernández, que se desplazó esta semana hasta el lugar en el que se han iniciado los trabajos, recordó que se trata de “uno de los sitios emblemáticos de nuestra ciudad, donde hemos apostado desde el equipo de Gobierno por hacer una obra diferente, que va a suponer un antes y un después para el sector turístico de la ciudad, y una obra que va a cuidar el entorno y nuestro medio natural, el monumento más importante que tenemos y el que nos identifica en el resto del mundo, que es el Tajo”.
En concreto este primer tramo discurre desde la conocida como ‘Casa Manolillo’ hasta la base del Puente Nuevo, y el objetivo es acondicionar y dotar de las correspondientes medidas de seguridad al camino que ya existe y que es visitado a diario por decenas de turistas, que pasan por este lugar a pesar del riesgo que ello conlleva.
“Por ello, vamos a trabajar principalmente en la seguridad, para que se pueda pasear por este bello espacio con total tranquilidad”, afirmó Fernández.
Se trata de la primera fase de un proyecto global que, según apuntó Maripaz Fernández, “tenemos prácticamente aprobado por todas las delegaciones territoriales implicadas”, que pasará por debajo del Puente Nuevo para iniciar un recorrido por la garganta del Tajo.
Estos trabajos serán financiados en gran parte por la Junta de Andalucía, a través de las subvenciones que se destinan a Ronda como Municipio Turístico, recordando que gracias a este programa ya se han recuperado otros caminos históricos, como los de Albacar, Ollerías o Cijara.
En breve se anunciará la licitación de las siguientes fases del proyecto, que permitirá “pasear por el corazón de nuestro Tajo”, apuntó Maripaz Fernández. El sendero recorrerá la Garganta del Tajo, en su primer tramo.
Para ello, se rehabilitará el camino histórico de la ladera izquierda del Tajo (siguiendo el cauce del río), hasta la base del machón derecho del puente, para pasar a un segundo tramo totalmente diferente, por debajo del puente. Permitirá pasar por las plataformas de Endesa y las acequias de los Molinos y Huertas del Tajo, y continuar por lo que sería el último tramo gracias a la instalación de una nueva plataforma peatonal voladiza, hasta concluir en la ermita de San Miguel.