La policía china inició una investigación contra una empresa minera que, al parecer, agujereó un tramo de la Gran Muralla de 2.000 años de antigüedad durante una prospección en busca de oro.
La policía china inició una investigación contra una empresa minera que, al parecer, agujereó un tramo de la Gran Muralla de 2.000 años de antigüedad durante una prospección en busca de oro.
La empresa, Hohhot Kekao Mining, dañó alrededor de 100 metros del monumento más conocido de China con dos agujeros de cinco metros de profundidad, ocupando un área de unos 300 metros cuadrados, a la altura de la localidad de Pogendi.
El responsable del departamento de patrimonio cultural regional, Wang Dafang, aseguró que el daño a la muralla era “irreparable” y recordó que la compañía había sido advertida en cinco ocasiones para que detuviera sus operaciones “pero continuó su vandalismo”.