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Provincia de Granada

Técnicos de la Junta estudian el proyecto de la granja de visones en Padul para comprobar si cumple la norma

Según el colectivo ecologista, el proyecto contempla la cría de hasta 7.000 visones al año para sacrificarlos por su piel, y que los cadáveres se usarían para fabricar pienso para otros animales

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Los técnicos de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía están estudiando el proyecto de instalación de una granja de cría de visones en unas naves cercanas al Puntal, en Padul (Granada), para comprobar si cumple los requisitos legales para este tipo de explotaciones y si puede suponer o no una afección al Parque Natural de Sierra Nevada, según han informado a Europa Press fuentes del Gobierno andaluz.

   Ecologistas en Acción ha pedido a la Administración autonómica que le deniegue la autorización por "la no necesidad de esta explotación y el potencial peligro para la biodiversidad del Parque de Sierra Nevada", lo que los técnicos no pueden resolver sin analizar si compromete o no la norma, según han recordado las fuentes.

   Según el colectivo ecologista, el proyecto contempla la cría de hasta 7.000 visones al año para sacrificarlos por su piel, y que los cadáveres se usarían para fabricar pienso para otros animales.

   En un comunicado remitido a los medios de comunicación hace unos días, censuraban "lo poco ético que resulta criar animales en penosas condiciones sólo por obtener su piel, habiendo ya en el mercado estupendas pieles sintéticas que permiten fardar sin causar daño a los animales" y advertían además del "peligro" que supondría la huida de algunos ejemplares en un lugar sensible, "pues el parque de Sierra Nevada se encuentra a escasos 300 metros de estas naves". "Si hubiera una fuga sería una catástrofe ambiental, ya que estos visones americanos son muy agresivos y acabarían con gran parte de la fauna autóctona", incidieron.

   Según recordaban los ecologistas, existe un Real Decreto 1628/2011, de 14 de noviembre, por el que se regula el listado y catálogo español de especies exóticas invasoras y donde se explicita que para usar animales exóticos en una granja deben haber motivos muy justificados. "No creemos que el gusto de ponerse unas pieles sea motivo para ello", concluían.

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