El Gobierno francés presentó este miércoles en el consejo de ministros el proyecto de ley que prevé alargar hasta finales de mayo el estado de emergencia en el país, una medida que justifica por la persistencia de la amenaza terrorista.
Esa disposición se decretó justo después de los atentados yihadistas del pasado 13 de noviembre en París y Saint Denis y tras ser ampliada una primera vez, hasta el próximo 26 de febrero, aspira a seguir vigente otro trimestre.
Su prolongación, que no tiene ahora tanto apoyo político como tras esos ataques, necesita ser aprobado por las dos cámaras legislativas y recibir la opinión favorable del Consejo de Estado, la máxima instancia administrativa de Francia.
Consciente de que su paso por el Parlamento es más complicado, el Ejecutivo subrayó en un comunicado que la eficacia de la protección de los franceses no reposará a largo plazo en medidas excepcionales como esta.
Desde su puesta en marcha, se han efectuado 3.289 registros sin autorización judicial, en los que se han detenido a 341 personas y se han incautado 560 armas, 42 de ellas de guerra.
Uno de esos registros, según sus datos, permitió abortar un nuevo atentado terrorista.
"La amenaza se mantiene a un nivel muy elevado, sea procedente de individuos aislados y radicalizados, sensibles a los mensajes que les son dirigidos para pasar al acto, sea de organizaciones terroristas cuya fuerza es indiscutible, en Francia o en el extranjero contra intereses o ciudadanos franceses", señala el comunicado.
El Ejecutivo aclaró que las medidas que se aplicarán con esta nueva prolongación serán "necesariamente menos numerosas" que las tomadas en el periodo inmediatamente posterior al 13-N.
Añadió que, en paralelo, ha decidido reforzar los medios de los que disponen las autoridades judiciales y administrativas en la lucha antiterrorista.
En esa línea se presentó también un proyecto de ley que, según el Gobierno del presidente François Hollande, refuerza el combate contra el crimen organizado, el terrorismo y su financiación, y mejora la eficacia y las garantías del proceso penal.
El texto incluye la posibilidad de efectuar registros nocturnos en los domicilios en casos de terrorismo o de riesgo de afrenta contra la vida, mejora los controles de identidad y, entre otros puntos, limita el tope de crédito de las tarjetas de prepago.
Horas antes de su presentación, el comisario de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Nils Muiznieks, advirtió de que el estado de emergencia en Francia ha tenido efectos concretos "relativamente limitados" en materia de lucha antiterrorista, pero ha restringido "fuertemente" el ejercicio de las libertades fundamentales.
