Jiménez formalizó la invitación a los dirigentes de la oposición a Muamar el Gadafi durante la visita que hizo a Bengasi.
La ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha invitado a los dirigentes del Consejo Nacional de Transición (CNT), el órgano que agrupa a los rebeldes libios, a que visiten España en las próximas semanas con el fin de reforzar la relación bilateral.
Jiménez formalizó la invitación a los dirigentes de la oposición a Muamar el Gadafi durante la visita que hizo a Bengasi, la capital de facto de los insurgentes, el pasado miércoles, han informado fuentes de Exteriores.
Durante su estancia en Bengasi, la jefa de la diplomacia española proclamó que el CNT es "el representante legítimo del pueblo libio" y al que le corresponde dirigir el proceso de reconciliación en el país una vez que Gadafi sea derrocado.
El viaje a Madrid de los responsables diplomáticos del CNT, Mahmud Jibril y Ali Esaui, aún no tiene fecha, aunque se trabaja para que sea en julio o a la vuelta de las vacaciones de verano como más tardar, según las fuentes.
España ha intensificado su relación con el máximo órgano opositor libio desde que envió al diplomático José Riera como 'embajador' en Bengasi a principios del pasado mes de mayo.
Jiménez comenzó a sopesar el envío de este representante cuando mantuvo el primer contacto con el CNT, de forma secreta, durante su visita a El Cairo el pasado 12 de marzo.
La ministra ha decidido romper todo contacto con el régimen de Gadafi, lo que le ha llevado a suprimir el puesto de embajador en Trípoli, que hasta ahora ocupaba Luis Francisco García Cerezo, quien regresó a Madrid el pasado 2 de marzo.
El edificio de la oficina diplomática en la todavía capital oficial de Libia permanece custodiado por personal local.
Gadafi mantiene aún abierta su embajada en Madrid, aunque sin interlocución con el Gobierno español.
En la reunión que Trinidad Jiménez mantuvo con el CNT en Bengasi, su presidente, Mustafá Abdelyalil, agradecieron a España el apoyo político y humanitario brindado desde que estalló el conflicto en Libia a finales del pasado mes de febrero, según las fuentes.
En un plano más informal, los dirigentes opositores también expresaron su admiración por los equipos de fútbol españoles y su deseo de ver algún partido de cuando visiten España.