Así lo ha anunciado el vicesecretario de Comunicación de los populares, Esteban González Pons, tras explicar que su partido quiere llevar a cabo “una reducción drástica” de los gastos de las formaciones políticas, especialmente en campaña.
En la conferencia de prensa posterior a la reunión del Comité de Dirección de los populares, el dirigente valenciano ha indicado que en la iniciativa de su partido, una proposición no de ley que a lo largo de la semana el grupo del PP presentará en el Congreso, se plantea “la prohibición por ley de la precampaña electoral”, “una campaña real, no legal, que dura tres meses”.
González Pons ha señalado que el Partido Popular hablará con las demás fuerzas políticas cuando se haga efectivo el registro de la iniciativa y todo con el fin de conseguir el máximo consenso posible.
“Queremos el consenso político, que no sea una propuesta sólo del PP, sino de aquellas fuerzas políticas que sean conscientes de que si los ciudadanos pasan por necesidades los partidos no pueden derrochar en campaña; puede ser una ofensa”, ha añadido antes de sentenciar: “Si nos tomamos en serio que el sacrificio es de todos, no hay que gastar en propaganda, publicidad y autobombo”.
El Partido Popular propone que los partidos gasten en publicidad electoral sólo los quince días que dura la campaña legal y no antes, durante la precampaña, y sin que ello signifique la eliminación de ciertos actos, sino simplemente evitar los costes.
Se trata, en palabras del responsable de Comunicación, de que al menos haya “un compromiso político”, de forma que si no hay una ley que restrinja esos gastos exista una clara voluntad de los partidos para proceder a ese ahorro.
La petición de los populares, según ha declarado Pons, obedece al “clamor social”, pues en estos tiempos de crisis “los políticos gastan demasiado”.
“Si los partidos gastamos la mitad, los ciudadanos tendrán más dinero”, ha resumido el dirigente del PP.
El vicesecretario de los populares ha recalcado que su partido insistirá en próximas fechas en la necesidad de adelgazar la estructura de la Administración General del Estado, especialmente para reducir los trámites burocráticos y evitar duplicidades en los ámbitos estatal, autonómico y local.
No es cuestión, ha dicho, de alterar el mapa competencial ni de quitar puestos de trabajo a los funcionarios o empleados de empresas públicas, sino de reducir la administración de los tres niveles –central, autonómico y municipal– a través de una simplificación de los trámites burocráticos.
Para ello, el PP requerirá el apoyo del PSOE, y así, el dirigente de los populares recalcó que aquella oferta de Mariano Rajoy para que entre ambos partidos se pacte dónde aligerar la administración sigue vigente.
A su juicio, es una propuesta de urgente aplicación, porque “en España no se debería congelar o bajar ni un céntimo de euro a los pensionistas sin haber reducido antes drásticamente la burocracia administrativa y política”.
González Pons añadió que en algunos ámbitos “a lo mejor es más necesario suprimir puestos políticos”. Así, reiteró la propuesta de su partido de erradicar ministerios y la vicepresidencia tercera de Manuel Chaves.
Sobre el número de “embajadas” que tienen algunas comunidades autónomas gobernadas por el PP en el exterior, Pons ha mostrado la disposición de su partido a “hablar de ello”, pero siempre desde el respeto a la autonomía de cada Gobierno regional.
CARGA CONTRA DE LA VEGA
González Pons pidió ayer a la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, y a su equipo que “quite las manazas” al CIS para que el Centro de Investigaciones Sociológicas “haga encuestas como hacen los demás”.
Pons calificó como “contundentes” e “insistentes” los últimos sondeos publicados en los medios de comunicación, especialmente el último del diario El Mundo, que otorga a Mariano Rajoy la mayoría absoluta y una holgada victoria al PP en varias comunidades autónomas donde no gobierna.
A tenor de esos resultados, González Pons envió, irónicamente, “un recuerdo al CIS”, y aprovechó la ocasión para pedir a De la Vega y a su equipo que “quiten las manazas” del Centro de Investigaciones Sociológicas.
El último barómetro del CIS daba al PP el triunfo electoral, aunque por escaso margen con el PSOE. La encuesta se efectuó antes de conocerse las medidas del Gobierno para recortar el gasto y reducir el déficit.
