Los maullidos hacían estremecer a los bomberos y a los vecinos que seguían las operaciones de rescate. Ocurrió en la mañana de este viernes en la Calle Zamorano de la zona de La Trinidad en Málaga capital, donde un gato había quedado atrapado en un coche.

Allí, una dotación de bomberos de Málaga ha protagonizado un complicado rescate en el que primero tuvieron que desmontar una rueda y otras partes inferiores del vehículo, aun así, el felino de gran tamaño y algo grueso, no podía ser extraído al haber quedado su cadera enganchada en la dirección del mismo. Tras intentarlo poniéndole agua con jabón, que tampoco sirvió para sacar al animal, que maullaba con desesperación mientras su dueño intentaba calmarlo, decidieron avisar a una veterinaria de la zona para que le inyectara un calmante, y de esta manera, al relajarse el animal, intentar girarlo sobre sí mismo y así lograr dar buen fin al rescate.

Finalmente, y cuando la tensión subía en la zona y más curiosos se arremolinaban en la calle, la llegada del propietario del vehículo facilitó un desenlace positivo, ya que se pudo abrir el capó del coche y así, proceder a sacar al gato por la zona del motor. Un escate que terminó entre aplausos de los vecinos cocngregados en la calle.