La despoblación del Centro Histórico de Málaga es una fenómenos paulatino y continuo. Un hecho que ha ido en paralelo a la reforma urbanística del mismo. Hace dos décadas la población de vecinos de la almendra era de 32.000 y hace dos años era de 4.200. Estas cifras responden a datos de un informe que el Observatorio de Medio Ambiente Urbano (OMAU) realizó hace dos años y que el grupo municipal de Málaga para la Gente puso ayer sobre la mesa como una consecuencia de los planteamientos enfocados sólo al turismo y no en convivencia con los residentes. MPG hizo también referencia a otro estudio del mismo organismo en el que se recoge que el 92% de los bares del centro incumplían la antigua ordenanza y que más de la mitad no reservaban el espacio peatonal al que les obligaba la legislación, por lo que argumentaban que “no queremos que con la nueva normativa vuelva a pasar lo mismo, provocando la expulsión de los residentes que se ven obligados a huir del centro por la invasión de terrazas, los apartamentos turísticos, el exceso de ruido y el turismo de borrachera”.
El portavoz de grupo municipal de IU-Málaga para la Gente, Eduardo Zorrilla, criticó ayer miércoles que se está “negociando mantener los excesos de terrazas” en la capital malagueña “a espaldas de los vecinos”. Así, ha indicado que “lo primero que se ha hecho tras aprobar la nueva ordenanza, en vigor desde el 6 de julio, es sentarse a negociar unilateralmente con los hosteleros planes de aprovechamiento en 14 zonas de la ciudad, 12 de ellas en el centro histórico, de espalda a los vecinos que son los principales afectados por el exceso de las terrazas”. Zorrilla criticó que los planes de aprovechamiento “van a utilizarse para saltarse la normativa y se limitaran a cuestiones estéticas”. “Entendemos que los planes de aprovechamiento deben de hacerse únicamente en espacio singulares y siempre con el objeto de restringir el uso de ellos dada sus peculiares condiciones urbanísticas”, dijo. Además, en rueda de prensa, consideró que “debe respetarse la obligación recogida en la ordenanza municipal en las que se indica que para la elaboración de los Planes de Aprovechamiento se tendrá en cuenta a las asociaciones legalmente constituidas”. Según Zorrilla, “los planes de aprovechamiento que se han incluido en las nuevas ordenanzas al final van a servir como la herramienta perfecta para poder saltarse cualquier tipo de prohibición o restricción”.
“Nuestra propuesta es simple: que se limite la excepcionalidad de la ordenanza a los casos verdaderamente excepcionales y que no sirva en ningún caso para ampliar el número de mesas y sillas o la superficie que de destina a terrazas, debiéndose justificar mediante un informe su necesidad y que responden a un interés público”, subrayó. Para el edil de IU, “no están justificadas ni se pueden entender estas excepciones generalizadas a las nuevas ordenanzas, salvo si lo que se pretende sea realmente mejorar las condiciones del uso de la vía pública para un determinado sector empresarial, ya que en lo que respecta al residente poco o nada se le ha tenido en cuenta, tratando con estas de hacer legalizable todo lo que hasta ahora ni inspectores de comercio ni área de seguridad han podido controlar”.
