Cuenta atrás para la marcha por una sanidad “digna” en Málaga. La convocatoria ciudadana prevista para este domingo, 27-N, y que sigue la estela de las celebradas en ciudades como Granada o Huelva, movilizará a los vecinos para denunciar los recortes y la falta de personal al son de silbatos, matasuegras y hasta trompetillas. El promotor de la cita que pone contra las cuerdas a la Junta de Andalucía, Jonathan Andrades, se sentaba hace unos días en El Debate de Ondaluz TV donde defendía la legitimidad de la protesta “que llega en el momento oportuno”.
“No entiendo a los que me tachan de oportunista, como ciudadano tengo derecho a convocar una manifestación”, aseguró Andrades, que insistió en que la marcha “no está politizada”, ya ha recibido el apoyo de dos “partidos opuestos”, como son Partido Popular y Podemos.
Un cabreo por la situación de la sanidad malagueña, que ostenta indicadores a la cola en las estadísticas andaluzas en número de camas o listas de espera -67 días de demora-, que se canalizó a través de las redes sociales, donde el grupo “Málaga por una Sanidad Digna” reúne ya a más de 4.000 personas. “Hemos corroborado que hay cierto miedo en la profesión médica por las posibles represalias por apoyar la marcha”, apuntó Andrades. La convocatoria en Granada logró juntar el malestar de 50.000 personas; aquí, en Málaga, su promotor estima que podrían secundarla entre 12.000 y 15.000 malagueños de toda la provincia, “sin banderas políticas o de siglas, solo la de Málaga”. La marcha, que partirá a las 11:30 horas de la Plaza de la Marina, concluirá junto al Hospital Noble donde se leerá un manifiesto.
En boca de todos
Málaga ha perdido 1.600 trabajadores del ámbito sanitario en los últimos años, pasando de 17.134 trabajadores en 2010 a los 15.533 de este año, según denuncia Comisiones Obreras, que sitúa a la provincia, junto a Sevilla y Granada como las más afectadas. El sindicato asegura que Andalucía es, junto con Cataluña, las comunidades autónomas donde más se ha recortado en el presupuesto sanitario desde 2010. El cierre de camas este verano se cifró en 350, una cantidad similar al tan reivindicado y prometido tercer hospital.
“Hemos pedido el apoyo a esta marcha a todos los colegios oficiales, de médicos, enfermería, farmacéuticos...”, aseguró Andrades, que insistió que “como paciente, ciudadanos que pagamos impuestos y somos usuarios de la sanidad pública podemos manifestarnos como hacen padres y estudiantes y nadie lo pone en duda”. Con la sombra de las fusiones hospitalarias que acecha a Granada o la polémica de los conciertos con Hospitales Pascual, que también toca de lleno a Málaga, la sanidad vuelve con el inicio del curso a boca de todos, tras un verano en el que ha copado titulares nacionales a golpe de renuncias de personal o urgencias colapsadas.
La pasada semana los jubilados del Colegio de Médicos de Málaga arrancaban la promesa del Gobierno andaluz de crear una mesa con la presencia de profesionales de los hospitales públicos y de Atención Primaria para mejorar el servicio. Fueron precisamente ellos, aquellos que ejercieron la sanidad durante décadas, los que dieron un paso al frente para dar a la Junta la “receta” de una mejor sanidad, destacando su trayectoria y reivindicando más inversión, “en 2010 había 700 millones de euros de más”.
Izquierda Unida puso hace poco en marcha una campaña para “tomar el pulso” a la sanidad con el objetivo de ser el detonante para la movilización de plataformas y sindicatos, aunque el coordinador provincial, José Antonio Castro, aún estudia si la formación se sumará a la protesta “porque ha creado suspicacias”.