Las manos halladas este martes en la playa de las dunas de Calahonda
pertenecen a Natalia, la mujer asesinada presuntamente por su expareja en Marbella y arrojada al mar sin cabeza ni manos. Así lo han confirmado fuentes policiales, quienes han precisado que
los agentes de la Brigada Local de Policía Científica han cotejado la huella del dedo índice de una de las manos resultando identificada como perteneciente a la misma.
Las manos han sido localizadas en la tarde de este martes, cuando el servicio Emergencias 112 Andalucía recibió, a las 15.15 horas, el aviso de un particular alertando de la presencia de lo que parecía ser una mano en la playa de las dunas de Calahonda, en el municipio malagueño de Marbella.
Ante tales hechos, se activó el protocolo policial y las unidades intervinientes rastrearon la zona, confirmando la localización del miembro. Posteriormente, y dentro del despliegue establecido, se halló en las proximidades una segunda mano. Ahora, continúa la búsqueda para localizar la cabeza.
El cadáver mutilado de Natalia apareció el pasado 8 de enero en la playa de La Cañas, a unos cuatro kilómetros de donde este martes han aparecido las dos manos. Su expareja, de nacionalidad colombiana como la víctima, fue detenida tras la denuncia de los familiares de la mujer. Este hombre admitió los hechos, primero ante la Policía Nacional y luego ante el juzgado de instrucción, el cual decretó su ingreso en prisión.
El detenido confesó que asesinó a su pareja y arrojó su cuerpo y los restos al mar, por lo que miembros del Grupo de Actividades Subacuáticas (GEAS) de las Guardia Civil iniciaron el pasado jueves la búsqueda de los restos mortales, primero, donde el detenido dijo a la Policía Nacional que los había tirado, pero después se amplió a la zona entre ese lugar y el sitio en el que apareció el cadáver.