El Belén Viviente Diocesano que preveía abrir sus puertas este viernes ha sido aplazado, en principio a los días 14 y 15 de enero, debido a la alta incidencia de la pandemia de la COVID-19 y a la aparición en las últimas horas de positivos en el equipo organizador.
Así lo han indicado desde el Obispado de Málaga, que ha destacado la importancia de anteponer la salud y la seguridad tanto de los alumnos que participan en dicho Belén Viviente como de los visitantes.
El Belén Viviente, que fue visitado días atrás por más de 1.200 escolares, se abría este viernes y sábado al público general, que lo iba a poder disfrutar de forma gratuita en la Casa Diocesana Málaga, junto al seminario.
Las siete escenas evangélicas de la Natividad (Anunciación a María; Visitación; Censo; Palacio de Herodes; Anunciación a los pastores; Nacimiento y Adoración de pastores y Reyes Magos) y las actividades lúdicas preparadas para toda la familia, ocupan un total de 3.600 metros cuadrados de la Casa Diocesana.
La representación de los pasajes bíblicos y la recreación del ambiente de la ciudad de Belén en el año 1 la llevan a cabo 120 alumnos del colegio diocesano Padre Jacobo, mientras que otro grupo de alumnos del colegio diocesano Cardenal Herrera Oria se encarga de guiar a los visitantes por las distintas escenas.
El evento contemplaba, además, una amplia zona de juegos, castillos hinchables, talleres infantiles de manualidades navideñas, puesto tradicional de castañas, puestos comerciales, y la presencia de los pajes de SS. MM. los Reyes Magos de Oriente, con buzón real para recibir las cartas de todos los niños de Málaga. Además de una barra de comida y bebida a precios populares.
Ahora, habrá que esperar al mes de enero, si la incidencia de la COVID lo permite, para disfrutar de este tradicional Belén Viviente Diocesano, que el pasado año ya se tuvo que celebrar de manera virtual por la pandemia.