José Pérez Herrera, entrenador del Xerez DFC, hablaba tras el partido de su equipo en Puente Genil en el que, gracias a la victoria por 2-4 frente a los pontanos, certificó matemáticamente su ascenso a la Segunda RFEF.

Un escenario que vio arrancar el proyecto de Pérez Herrera con los cuartos de la Copa RFAF a lo que el técnico comentaba que “la última vez que estuvimos aquí fue por esas fechas y nos fuimos con buenas sensaciones a pesar de no habernos llevado la victoria. Sabíamos que podíamos terminar bien el año con una victoria aquí porque el equipo ha demostrado y es increíble la de obstáculos que han superado y encima estos cuatro partidos en diez días y se han dejado la vida en el campo. Es el premio que nos llevamos, un premio a la constancia, a la fe y a no rendirse nunca”.

El equipo tuvo que ponerse hasta en dos ocasiones a goles de los locales, “un primer golpe temprano que es un jarro de agua fría. Aparecen las dudas y el equipo ha seguido creyendo y ha remontado el partido en la primera parte. Hemos podido sentenciar y con el empate hemos tenido que sufrir frente a un buen rival. Hemos sacado fuerzas, hemos ido a por el partido y esas dos incursiones por banda izquierda han cerrado el partido”.

Para esta ocasión, el entrenador jerezano destacaba que “hemos buscado dar continuidad a la segunda parte contra el San Roque. Sabíamos que era el camino y teníamos que ir a muerte, avasallando en campo rival constantemente. Por fases lo hemos conseguido y los cuatro goles no son fruto de la casualidad, hay mucho trabajo. La victoria es mérito de todos, porque todos somos uno, las individualidades llegan a través del triunfo colectivo y quiero mencionar el caso de Padilla que ha estado toda la temporada en la sombra y ha hecho un gran trabajo en el vestuario para que seamos una piña”.

“El slogan no iba a ser humo, teníamos claro que lo íbamos a llegar a rajatabla independientemente del resultado. Es verdad que hemos tenido momentos difíciles al principio y aun así nos mantuvimos y dimos protagonismo a gente veterana y gente joven. La filosofía es darle a cada uno su momento y lo han demostrado. Cada uno ha sabido esperar su rol de manera ejemplar y lo que hemos conseguido es el fruto de todo un año. Hoy hemos ganado, hemos ascendido, pero si no se hubiese conseguido nos habríamos ido igualmente orgullosos del trabajo del equipo”, finalizaba.