La Delegación de Deportes ha emprendido esta semana los trabajos de abonado de la Pradera del Complejo Municipal Chapín, con el objeto de reponer los nutrientes necesarios para el desarrollo del césped en las mejores condiciones.El delegado de Deportes, Jesús Alba, ha informado que “el césped es un gran consumidor de energía y muy sensible a la falta de nutrientes y que con el tiempo las reservas de estos elementos van disminuyendo, debido a varios factores como los riegos, lavados y cortes de la hierba y otras circunstancias, por lo cual se hace necesario un nuevo aporte”.
En este caso, se ha realizado el abonado con NPK, producto que aporta microelementos primarios que el césped toma en grandes cantidades, como nitrógeno, fosfato y potasio. Jesús Alba ha explicado que “hay zonas de la Pradera en las que la semilla ha nacido y ahijado en condiciones óptimas, mientras que en otras, ni siquiera ha salido la hierba, por lo que con esta aportación de abono se pretende que el césped enraíce en mejores condiciones y los rizomas crezcan adecuadamente para tapizar más el terreno de juego, de manera que quede más tupido y el verde de la Pradera mejore su color”. Estos trabajos de abonado se vienen complementado con mantenimiento de riego.
Balance de intervenciones
Tras esta actuación, el delegado de Deportes ha hecho un balance de las últimas intervenciones que se han realizado en este espacio deportivo, como la limpieza y desatasco de los imbornales que circundan la Pradera que se encontraban llenos de tierra, piedras y hojas para evitar problemas en la época de lluvias. Igualmente, se han realizado mejoras en los monolitos de luz y se han colocado casetas de riego en el Complejo Municipal Chapín. Asimismo, se han instalado nuevos bancos y se han arreglado los que ya existían.
Cabe recordar otras inversiones realizadas en estas instalaciones deportivas, como la renovación de luminarias de la Pradera, la instalación de una fuente pública, las obras en el edificio ‘Jerez 2002’, sede de la Delegación de Deportes; la colocación de marcas de señalización de kilómetros en el interior de la Pradera para corredores; la renovación de los tramos deteriorados de la valla perimetral de madera; la instalación de un nuevo sistema de riego y de un segundo campo de rugby.
