El presidente del Girona no recibió bien la derrota de su equipo y al finalizar el choque de Montilivi abrió la caja de los truenos y de la polémica, según recogen los compañeros del Diari de Girona.
En el rotativo gerundés se puede leer que “al final del partido y ante la lógica decepción del resultado, el presidente del Girona, Joaquim Boadas, hizo unas declaraciones que seguramente levantarán ampollas, fruto de la frustración por no haber sumado tres puntos con los que todo el mundo contaba. Tras explicar que había bajado al vestuario a dar ánimos a la plantilla ya decirles que “no son ni mejores ni peores y que las opciones siguen intactas”, Boadas insinuó que los jugadores del Xerez habían venido primados por algún otro equipo porque, según él, “si hubieran jugado así toda la temporada quizás ahora estarían luchando con nosotros para subir a Primera”. “No sé por qué factor iban tan espoleados. Si hubieran   jugado así todo el año, estarían luchando con nosotros para subir", añadía. Boadas se iba embalando cada vez más hasta el punto que acabó por decir, visiblemente alterado por la inesperada derrota, que “pediremos que se investigue”.
El presidente explicó que durante la semana “nos estaban mirando mal a nosotros” y ahora resulta que “quizás son los otros los que quizás han hecho algo. Lo encuentro extraño, parecía como si se hubieran de salvar”.
Boadas negó que el Girona quiera emprender acciones contra el Xerez pero sí aseguró que pedirán que se investigue. “Aquí hay algo raro”, decía. En este sentido, Boadas recordó que “está tan penalizado pagar para ganar como para perder”.
En el mismo rotativo aparecen unas declaraciones de dos jugadores del Xerez como son Raúl Cámara, que ejerció precisamente de capitán en el encuentro de Montilivi, y del ex jugador del Espanyol, Ernesto Galán, bastante conocidos por tierras catalanas.
Raúl Cámara respondió a Boadas al conocer que quería abrir una investigación. “No hay problema. Que lo abra ya ver qué pasa”, dijo.
Ernesto Galán, por su parte recordó que la plantilla del Xerez se juega “muchísimo” porque “tenemos que encontrar equipo para la próxima temporada”.
El entrenador del Girona, por su parte, no vio nada extraño y sí a un  Xerez “tranquilo” y “muy relajado”, que venía sin ningún tipo de presión.  A pesar de todo, para el técnico fue el Girona el que comenzó mejor el encuentro. “No hemos salido mal. Es cierto que no hemos llegado demasiado, pero la pelota era nuestra. Ahora, el primer gol ha sido muy extraño. Entonces  nos hemos desajustado y hemos estado demasiado nerviosos. No esperaba que lo estuviéramos tanto . Entiendo que nos jugamos mucho y que podemos estar presionados, pero no tanto”", analizó. “Tenemos una mentalidad tan ofensiva que sólo hemos buscado encontrarnos bien con la pelota y nos hemos despistado en exceso  y nos han hecho daño”.