Los Príncipes de Asturias, don Felipe y doña Letizia, ejercerán como padrinos de la coronación canónica de Nuestra Señora de la Esperanza, que se llevará a cabo el próximo sábado 14 de septiembre en la Santa Iglesia Catedral. De este modo, la Casa Real atiende una petición cursada desde la Hermandad de la Yedra y en cuyas gestiones ha participado de manera activa el arzobispo castrense, Juan del Río Martín.
Conviene recordar a este respecto que Su Majestad El Rey ostenta el título de hermano mayor honorario de la cofradía desde el fallecimiento de su padre, don Juan de Borbón. Además, los vínculos existentes entre la Hermandad de la Yedra y la Armada se hacen palpables cada Madrugada del Viernes Santo con la escolta que presta al paso de la Virgen de la Esperanza una escuadra de infantes voluntarios de Marina.
Ahora queda pendiente de confirmación la posible presencia física de los Príncipes de Asturias en el acto de coronación canónica de la Virgen de la Esperanza, un asunto que en cualquier caso no será posible conocer hasta poco antes del 14 de septiembre. Sea como fuere, el hecho de que don Felipe y doña Letizia acepten este nombramiento ya es considerado como una extraordinaria noticia en el seno de la cofradía de la Plazuela, cuya junta de gobierno, presidida por Ildefonso Roldán, trabaja para que este acontecimiento se revista de la mayor solemnidad posible.
tras la renuncia del papa
Sin ir más lejos, un nutrido grupo de hermanos ha tenido recientemente el privilegio de ser recibido en audiencia por Su Santidad Benedicto XVI apenas unos días antes de que anunciara su renuncia.
Tras confirmarse esta noticia, la Hermandad de la Yedra ha emitido un comunicado a través del cual reafirma “su amor filial al Vicario de Cristo”, al tiempo que agradece “las atenciones dispensadas a sus antiguos diocesanos por monseñor Del Río Martín, arzobispo castrense, que con gran celo pastoral” acompañó a la comitiva en su encuentro con el Santo Padre.
De igual modo, la cofradía agradece las atenciones recibidas por la Embajada de España ante la Santa Sede y la “cercanía” con el ministro del Interior, que precisamente esos días encabezaba una delegación especial ante el Papa.
Por último, la Hermandad de la Yedra aprovecha la ocasión para elevar “fervientes oraciones por la Iglesia y por el colegio cardenalicio ante la responsablidad que asumen” tras la renuncia del Santo Padre y el proceso de sucesión que se iniciará en unas pocas semanas.