“Vamos a luchar hasta morir. Nos quitaron a nuestros hijos por la cara”
Luisa Fernanda Terrazas
“Queremos que todo el mundo sepa que esto no lo vamos a dejar aquí. Entre los juzgados y la Fiscalía tenemos más de 30 casos denunciados y los que van a salir y han salido, como los cinco que han contactado con nosotros a raíz de las exhumaciones. Nos consta que en Jerez hay más de 100, lo que ocurre es que todavía hay personas que no saben si denunciar o no”. Son palabras de la vicepresidenta de SOS Bebés Robados Cádiz y representante de Jerez, Luisa Fernanda Terrazas, una luchadora incansable de esta causa y afectada directa al perder a sus dos mellizos cuando fallecieron también en circunstancias extrañas, según su denuncia. Tras los archivos, tiene claro la lucha no se acaba aquí. “Vamos a luchar hasta morir, tenemos que hacer algo para que no sigan archivando, porque nos quitaron a nuestros hijos por la cara”, manifiesta. No hay olvidar que dos familias, una de Jerez y otra de Arcos siguen a la espera los resultados de las pruebas de ADN realizadas tras exhumar dos nichos.
Antonia Rodríguez
madre denunciante
“Mi hija puede estar en Mallorca y tener ahora 40 años”
“Me han archivado el caso estando pendiente de unas pruebas de ADN de una chica de Mallorca que contactó con nosotros por internet y a la que su padre le dijo antes de morir que la habían comprado en Andalucía. Las fechas coinciden porque nació en mayo del 71 y guarda un parecido con otro de mis hijos”.
Pepi Conde
hermana denunciante
“Mi madre fue a declarar y el caso ya estaba archivado”
La madre de Pepi tiene 82 años y pese a su delicado estado de salud volvió a declarar el 24 de mayo por su denuncia sobre la muerte de su hija en el año 67. Pepi también estaba citada, pero pidió que lo pospusieran por un viaje. El día 13 de junio le dijeron que el caso estaba archivado desde el 21 de mayo y que no acudiera a declarar.
Rosa María Montaño
madre denunciante
“Desde aquel día caí en una depresión de la que no me he recuperado”
Nunca vio a su hijo. Rosa María Montaño estuvo muy grave después de que los médicos le dejaran un trozo de placenta tras el parto. “Era primeriza. Me dijeron el día antes que todo estaba bien y cuando me puse de parto nada más nacer se llevaron al niño en un delantal de la enfermera y me dijeron que no me hiciera ilusiones que estaba raquítico”.
