Las delegaciones extranjeras procedían de países como Cuba Marruecos o el Sáhara
La octava edición de los Talleres por la Paz de San Pablo de Buceite quedó clausurada este fin de semana, después de que por el escenario de la calle La Viña pasaran buena parte de los niños y jóvenes que han venido participando a lo largo de la última de semana en alguna de las actividades propuestas.
La velada la iniciaron los pequeños del taller de manualidades, que protagonizaron un simpático pasacalle por los alrededores del escenario al aire libre, para mostrar parte del trabajo confeccionado en los últimos días.
Más tarde, por el escenario desfilaron los también jovencísimos alumnos del taller de canciones, al que este año se le ha añadido la percusión. Los pequeños habían aprendido durante la semana algunas canciones, acompañados por el ritmo de instrumentos de percusión, con los que habían experimentado un primer acercamiento. El resultado, una curiosa y acompasada banda que provocó la admiración del público.
Posteriormente, tocaba el turno a los chicos del taller de música orquestal, una de las novedades de este año. Por el escenario fueron pasando, en grupos de dos, tres y cuatro chicos, los alumnos de este taller para interpretar fragmentos de diversas piezas clásicas. Así, tuvieron oportunidad de mostrar su buen hacer con los violines, el oboe y otros instrumentos.
Su concierto finalizó, ahora sí, con todos los chicos sobre el escenario en formación de orquesta sinfónica para interpretar diversas piezas clásicas.
Antes del plato final de la velada, el alcalde de San Pablo, Andrés Beffa, agradeció la participación de todos y los emplazó a una nueva edición de los talleres, el próximo año. También se entregaron diversos reconocimientos y obsequios a los representantes de las delegaciones extranjeras participantes, procedentes de Cuba, Marruecos y el Sáhara.
Y, ya bien entrada la madrugada, el grupo Oba volvía a cerrar los Talleres por la Paz con sus versiones de temas rockeros clásicos.