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Jaén

La oferta de alojamientos crece, pero no todos están legalizados

‘Ashotel’ estima la existencia de más de 250 alojamientos ilegales, ofertados en Internet, denunciando la falta de control y un problema para la seguridad

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  • Vistas de la capital. -

La oferta de alojamientos a turistas y particulares en la provincia de Jaén es cada vez mayor, pero no todos están legalizados, a pesar de aparecer en las numerosas plataformas digitales que han proliferado en los últimos tiempos.

La Asociación Empresas de Alojamientos y Hoteles ‘Ashotel’ lleva dos años pidiendo que se controle la situación, ya que estiman la existencia de más de 250 alojamientos en la provincia que no están registrados y que suponen, además de una competencia desleal, un problema para la seguridad ciudadana. “Cada vez hay más plazas que se ofertan de forma ilegal, en alojamientos que no cumplen la normativa y donde puede alojarse cualquiera”, lamenta Juan Manuel Camacho, consejero de ‘Ashotel’.

Según datos facilitados por la delegada de Turismo, Pilar Salazar, actualmente existen 84 viviendas con fines turísticos inscritas en el Registro de Turismo en la provincia de Jaén. La inscripción es obligatoria y el objetivo de las administraciones y la Policía Nacional es lograr la regularización de aquellas que no se encuentren aún legalizadas. De ahí las reuniones sucedidas en las últimas semanas.

En plataformas como ‘Airbnb’ se ofertan pisos, casas de campo y habitaciones desde 9 euros al día hasta más de 60 euros; siendo cada vez más utilizados por los viajeros. En ‘Airdna’ desde 2016 al presente año se han duplicado los alojamientos, pasando de una oferta de 73 a los 169 disponibles en la actualidad. Destinos como la capital, Úbeda, Baeza y Cazorla son los lugares donde más plazas de este tipo se ofertan.

Desde ‘Ashotel’ denuncian la “falta de control” en estos alojamientos y las “continuas inspecciones reglamentarias para los legalizados”, solicitando que “todos los establecimientos tienen que ser sometidos al mismo control” de inspección sanitaria o de seguridad. “La junta de Andalucía tiene que velar para que estén dados de alta, con un número de registro. Sin embargo no se les inspecciona porque no llegan a ellos, a pesar de estar a la vista de todos en Internet. Al final, sólo se controla a los establecimientos legales, los que están registrados”, avisa.

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