“Debemos mantener la presión sobre el régimen de Trípoli en línea con las resoluciones de la ONU, a la vez que buscamos formas innovadoras de ayudar al Consejo Nacional de Transición (CNT)”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, en la apertura ayer en Estambul de la reunión del Grupo de Contacto sobre Libia.
El ministro turco aseguró que se ha producido “una progresiva mejora de la situación sobre el terreno”, en referencia al avance militar de los rebeldes, pero reconoció que la situación humanitaria es motivo de “preocupación”.
“Las actuales sanciones contra el régimen están empezando a tener efectos negativos sobre la población civil bajo el control de Gadafi”, admitió, y añadió que su Gobierno teme que la situación empeore con la llegada del Ramadán.