Eduardo Vidal (director general de Mémora, una de las dos entidades que aglutina Fugasa, junto a Albia), recuerda que la colaboración entre las entidades, es decir, la funeraria y el Ayuntamiento, es todo un ejemplo y sobre todo que viene de muchos años atrás y destaca que han sido casi tres millones de inversión los que han hecho posible este edificio, que cuenta con 2.362 metros cuadrados de inmueble y un aparcamiento de unos 4.000 metros cuadrados. Asegura Vidal que “es una instalación con elementos funerarios modernos y funcionales, acorde a la situación actual del mercado”, apuntando a que a pesar de la situación actual de crisis, hay empresas como Fugasa que quieren crecer.
Instalaciones
Este inmueble (que dará trabajo a seis personas), ubicado en el polígono industrial, que cuenta con cuatro salas de velatorio (singular es que cada una cuenta con un color distinto),una de despedida, una capilla para 250 personas, cafetería, garaje, exposición de féretros, urnas y lápidas, floristería, espacio para la dirección del tanatorio, un lavadero, etc, comenzará a funcionar hoy, pero será el horno crematorio el que no se podrá utilizar hasta que al Consejería de Medio Ambiente termine con la instalación de los tubos del gas y por supuesto dé su visto bueno, por lo que estos primeros días, ya que confían, tanto Ayuntamiento como Fugasa, en que sea cuestión de poco tiempo, los fallecidos podrán ser velados en El Puerto pero en cambio tendrán que ser trasladados a la cercana localidad de Jerez. Y es que, aseguran las fuentes consultadas por este medio que estas instalaciones están acordes a las nuevas normativas medioambientales, por lo que cuentan con un amplio estudio y persigue objetivos muy claros como que su climatización y los procesos por los que se beneficia están dirigidos al ahorro energético.
Vidal considera que con esta nueva instalación “se da mayor cobertura a la provincia”, pues hay tanatorios en Cádiz, Jerez, San Fernando y Sanlúcar, al que se une El Puerto, que ya era hora, como insisten los colectivos sociales y vecinales locales, de que se contara con éste, pues son más de 85.000 los habitantes, una población que en verano se duplia, “por lo que, previendo estos datos, queríamos ponerlo en marcha”. En total, serán mil las familias que cada año podrán pasar por el tanatorio portuense, lo que supondrá grandes beneficios para los que velan a sus fallecidos, pues como informa el director general de Albia, José Romero, pues “pretendemos dar tranquilidad a los familiares, sobre todo al eliminar los traslados, que a su vez suponen un peligro” pues el nerviosismo que generan situaciones de este tipo hacen que la conducción no sea la idónea. Además, “hay mucha gente mayor que no tiene cómo trasladarse a otras ciudades”, por lo que era una necesidad.
Facilidades
Por otro lado, Romero añade que “es un edificio singular, y agradecemos al Consistorio que, dentro de la legalidad, haya puesto las facilidades requeridas para que se pudiera poner en marcha”, a pesar de que la obra, realizada por Astigia, ha asumido algunos retrasos, pues en una visita anterior realizada a los trabajo se apuntó a febrero como mes de inauguración y puesta en marcha de la instalación funeraria, pero hubo problemas con las lluvias, como en otras muchas obras realizadas en la ciudad a lo largo de este verano.
Albia quiso agradecer el proyecto del arquitecto Antonio Singlair y otros profesionales que han hecho posible el edificio
El alcalde, Enrique moresco, entiende que “no era lógico que una ciudad con casi 90.000 habitantes no tuviera un tanatorio. Cuando entré en la Alcaldía desbloqueé un proyecto que llevaba doce años en un cajón. A partir de mañana (por hoy) no pasará esto, gracias al esmero que se ha puesto”. Agradeció que Fugasa haya elegido el nombre de la ciudad para el tanatorio, pues así será reconocido por todos los habitantes, y además porque “viene a dignificar una situación inevitable, no sólo por el fallecido, sino también por los familiares, pues no era de recibo que en el siglo XXI El Puerto no tuviera tanatorio", por ello considera que ambas partes, Ayuntamiento y Fugasa, "han puesto mucho empeño”. Así, reconoce que se cumple un compromiso recgido en el programa electoral.
A continuación, el párroco de la Iglesia Mayor Prioral, Diego Valle, procedió a bendecir la capilla del inmueble, que como bien apuntaron desde Fugasa, que será un espacio amplio y luminoso donde aquellas personas que así lo quieran puedan rezar y donde se oficien las misas por los fallecidos.
Destacar que las salas están completamente equipadas, y son lo suficientemente amplias como para que las familias puedan estar cómodas, otro de los requisitos que se pretendía al comenzar este proyecto, pero con todo, los baños no están adaptados para los discapacitados o personas que necesiten utilizar una silla de ruedas.
En general, tanto la ciudadanía asistente como los miembros de la Corporación municipal que no quisieron perderse este importante acto entienden que es un buen proyecto.
