Once días después de que el hotel Santa María acogiera la asamblea extraordinaria del Racing Portuense, la indefinición del estado en el que se ha mantenido la entidad racinguista, empieza a ser ya más claro y elocuente. No por grave dejaba alguna que otra puerta abierta a una posible reconducción de la situación. Comatoso y sin síntomas de recuperación, con la firma del acta en la tarde de ayer, el punto sin retorno debe llevar a la disolución del Racing, empezando a ser una realidad más que palpable con el paso de las semanas.
El acta de la asamblea de socios se terminó por rubricar en la tarde de ayer lunes y tal y como es preceptivo, será entregada a la Administración Concursal, Federación Andaluza de Fútbol y bufete de abogados. Ésta, que reposaba sobre el despacho de las oficinas del José del Cuvillo y con pocos visos de ser firmada, finalmente se rubricó.
Con estas tres notificaciones, el proceso de liquidación entra en una nueva fase que empezará desde hoy mismo a ser efectivo y que más allá de determinaciones deportivas o extradeportivas, amenazan no solo con acabar con la disolución del club, sino ahondar en resoluciones, reclamaciones y otras vías judiciales, al objeto de salvaguardar y aclarar actuaciones llevadas a cabo durante todo el proceso concursal.
Efecto dominó
En primer orden, en el deportivo, con la citación a la Federación Andaluza de Fútbol, deja de ser efectivo oficialmente la posible participación en Tercera División y tira por tierra el auto judicial que imposibilitaba descender administrativamente al equipo racinguista desde su ingreso a la Ley Concursal.
Es por tanto, que a 30 de julio, el equipo racinguista es, hoy por hoy, escuadra de Primera Andaluza a todos los efectos, realidad que tampoco se llegará a cumplir al no salir en esta categoría.
Sin equipo con el que pueda competir, sin junta gestora y sin visos de firmar un convenio concursal, las perspectivas de futuro son más que comprometidas.
La rúbrica del acta por parte de los socios y del presidente en funciones se antojaba imprescindibles para que el Juzgado de lo Mercantil tome una decisión respecto al club. En un sentido o en otro y se conozca cual va a ser la suerte definitiva de éste. Lo que sí parece claro que con el acta firmada, la defunción de la entidad se antoja más que inminente.
Reunión a tres bandas
De igual manera, a lo largo del día de hoy, como queriendo dejarlo ya despejado antes de que termine el mes, tanto la Concursal, abogadas y la jueza Nuria Orellana departirán con el asunto del Racing Portuense de por medio y ya con el acta firmada entre sus manos. Recordar, que la encargada del Juzgado de lo Mercantil Nº 1 de Cádiz, tras nueve años al frente, abandonará dicho juzgado para trasladarse a la Audiencia Provincial de Málaga.
El mes inhábil vacacional de agosto y la acumulación de trabajo que viene padeciendo dicho juzgado, pudiera acelerar o dejar perfilado el destino del club para el mes de septiembre u octubre, fecha clave para el convenio concursal.
