Si con el acto se pretendía reconocer con la entrega de premios a los distintos jugadores de la pasada temporada, la ocasión resultó ir más allá. La peña Ratones Coloraos consiguió aglutinar a lo más granado en una noche que se vistió con las mejores galas, para dar como se merecía con la entrega de las distinciones.
Ratones Coloraos, fiel a su idiosincrasia y a su perfecta manera de entender la animación, hicieron cómplices a las decenas de aficionados y miembros de otras peñas que sirvieron para disfrutar de un momento de alegría y de unión. Al acto también acudió el presidente del Racing Portuense, Ignacio Corzo, que no quiso perderse tal acontecimiento. El disfrute se alargó más allá de la medianoche. Había buen rollo y mejores motivos para seguir alargándolo en el tiempo.
Atrás quedó la temporada, los sufrimientos y las fatigas pasadas, de ahí que una semana después de que todo acabara, las ganas de risas, de cánticos y de buen humor fueron dando color, el rojiblanco, con el que se tiñó el recinto. Banderas y bufandas llevaron por un momento a transportar a los presentes a una imagen retrospectiva con las mejores tardes del Cuvillo.
El pub Pepa fue el lugar elegido para la entrega de premios. Bebidas, comidas y música pusieron el colofón a una velada entrañable que puso de manifiesto la calidad humana y deportiva de esta peña, que amolda con su manera particular de hacer racinguismo.
El Ratón del área recayó en Álex Expósito, Ratón de más garra a Jesuli Nimo y Ratón más regular en Alberto Fernández.
