El capitán del Puerto, Peter Hall, declaró asimismo que el derrame fue “rápidamente controlado” y que “no hubo ningún incidente contaminante”.
De momento se sigue inspeccionando el buque y sus operaciones para comprobar si cumple con las normativas internacionales.
El carguero estaba realizando una operación de abastecimiento de combustible desde una gabarra cuando se produjo el rebosamiento de la manguera que conduce el combustible. A pesar de que se desplegaron barreras anticontaminantes alrededor de ambos buques, el hidrocarburo se extendió por la Bahía.
Greenpeace
Tras el último vertido provocado durante una operación de bunkering barco a barco, que realizaba el carguero panameño Zen 1 en Gibraltar, Greenpeace cree que es el momento de “asegurar un elevado nivel de protección medioambiental” de la Bahía tal como se acordó en el Foro Tripartito que tuvo lugar el pasado julio en Gibraltar.
“Las operaciones de bunkering de barco a barco que se realizan en la Bahía son muy contaminantes, dado que se producen pequeños vertidos de combustible mientras éstas suceden y siempre existe el riesgo de vertidos mayores, como el ocurrido el domingo en Gibraltar, que ha manchado cientos de metros de la Playa de Poniente de la Línea de la Concepción. Este tipo de operaciones tienen lugar en los principales puertos de la Bahía, Gibraltar y Algeciras, y se llevan a cabo, incluso, en zonas protegidas lo que implica un mayor riesgo de catástrofe ambiental por el valor de los espacios que pueden resultar contaminados”, señala la organización.
En esta línea, Greenpeace, como ya demandó en junio junto a otras organizaciones del Campo de Gibraltar, solicita a las administraciones responsables de ambos lados de la frontera “la eliminación de las operaciones de bunkering en los espacios protegidos”. “En el caso español, se sigue permitiendo que se realicen estas arriesgadas prácticas dentro del Parque Natural del Estrecho”, como ya denunció Greenpeace el pasado julio.
“El abandono de responsabilidades de las administraciones que tienen que asegurar la protección ambiental de la Bahía se hace hace cada vez más evidente. Por eso desde Greenpeace exigimos que se lleve a cabo la protección acordada en el Foro Tripartito y que no se quede sólo en el papel”, declaró ayer Sara del Río, responsable de la campaña sobre Contaminación de Greenpeace. La organización ecologista pide a las autoridades que se aclare cuáles han sido las condiciones del vertido, como, por ejemplo, la cantidad de combustible vertido, los impactos medioambientales y las empresas implicadas”.
El portavoz de Verdemar, Antonio Muñoz aseguró que el barco “tiene un largo historial de deficiencias, tanto ahora como antes, cuando se llamaba Albert 1 y navegaba con bandera de Chipre”. El portavoz de Verdemar ha citado como ejemplo 13 deficiencias detectadas en 2006 en San Petesburgo (Rusia) y las 38 que se le encontraron en el puerto de Bélgica.
El presidente de la asociación ecologista Agaden, Juan Antonio Carrasco, añadió que el incidente “da más credibilidad a la plataforma de ecologistas constituida recientemente en Sevilla, que denunció la descoordinación en estos asuntos”.
Reacciones
Por su parte el secretario provincial del PA, Ramón Sánchez Heredia, manifestó ayer que observa “asombrado” que “no se haga nada” ante los vertidos de hidrocarburo que se producen en el Campo de Gibraltar y exigió que se establezcan medidas preventivas para evitar los continuos vertidos que hacen un “daño enorme” a la costa, a la vez que se convierte en una “imagen muy negativa” para la comarca. Para el PA “el Gobierno del PSOE no tiene entre sus preferencias la comarca del Campo de Gibraltar”. Afirmó que “no basta con que limpien las playas, no basta con las declaraciones de que no pasa nada o de que no hay daños, porque sí que pasa, ya que el medio ambiente se degrada y la imagen también”.
El diputado nacional del PP, José Ignacio Landaluce, informó ayer por su parte que habían presentado unas preguntas parlamentarias sobre el vertido, culpando a Gibraltar de “no controlar las barcazas ni de comprometerse con tener a estos barcos que aportan el combustible de un barco a otro como se exige en la Unión Europea de las medidas de seguridad”. “Vamos a preguntar e insistir para que Fomento, Exteriores y Medio Ambiente presionen al Reino Unido para que este a su vez exija los gibraltareños que almacenen en tierra y pongan los mayores medios posibles para evitar accidentes medioambientales”, concluyó.
La Junta resta importancia al incidente
La consejera de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Cinta Castillo, consideró ayer que, a falta del informe final, el vertido de fuel registrado el domingo en la Bahía de Algeciras no tiene “mucha envergadura”, pues “ha cesado”, aunque esperan que “no haya ninguna incidencia más”. Castillo afirmó que ya se había procedido a la retirada del barco que ha causado el incidente cuando se abastecía de combustible en Gibraltar, “para que no hubiera más vertidos”, y cuestionada por los daños medioambientales registrados ha dicho que esperan que ese vertido no tenga “mucha envergadura, puesto que ha cesado”.
Tras firmar un convenio de colaboración con la Diputación de Sevilla, la consejera andaluza de Medio Ambiente indicó que aún no se había hecho el informe final sobre dicho vertido de fuel y que ahora “hay que evaluar y cuantificar lo que ha llegado a las playas” de la Bahía de Algeciras, “y ver si hay algún tipo de afección” en la costa. No obstante, subrayó que, “al cortarse el vertido” una vez detectado, la Junta de Andalucía espera que “no haya ninguna incidencia más”.
Juárez reclamará a Gibraltar el coste de la limpieza de la playa de Poniente
Un grupo de operarios municipales procedió ayer a limpiar la costa de Poniente de La Línea de la Concepción. Los restos de hidrocarburos, que arribaron a la mencionada playa durante la madrugada, estaban siendo retirados junto con la arena afectada por una brigada de trabajadores.
El concejal de Playas, Julio Sánchez, declaró que afortunadamente la poca diferencia habida durante estas jornadas en lo que a mareas se refiere y también a oleaje habían propiciado que la anchura de arena afectada en ese litoral fuera de aproximadamente un metro, por lo que esperaba que las labores terminasen ayer mismo.
Por su parte, el alcalde consideró que una vez más la ciudad, y el medio ambiente en general, sufre de este tipo de desgracia periódica que tiene su origen en la “inoperancia de Gibraltar para frenar una práctica entre buques que perjudica a todos, sin que por lo visto se tomen medidas preventivas”.
Hizo ver que “quien lo hace lo paga y tendremos que reclamar a Gibraltar el coste de volver a dejar en perfecto estado la playa”.
