La Peña Los 100 acogió días atrás un sentido homenaje de los amigos del mundo de la medicina de Abel Alfaro, el farmacéutico jerezano fallecido de forma repentina el pasado 15 de septiembre mientras trabajaba a los 50 años. Médicos, farmacéuticos, enfermeros y vendedores de casas farmacéuticas se reunieron para recordarle en la alitada, el nombre instaurado para sus jornadas de convivencia, a la que Abel nunca debió faltar.
Sus incondicionales del partido de fútbol de los lunes, la cita obligada con la que el lunes era menos lunes y con la que este grupo de luneros, de hasta 25 amigos, cogía fuerzas para afrontar la semana, siguieron adelante con los planes del propio Abel. En su grupo de WhatsApp los había emplazado al 8 de octubre para celebrar la tradicional alitada de octubre en La Jara, una convivencia en la que aprovechan para juntar a todas sus familias. Él siempre ponía las fechas. Esta vez también.
Cuenta su hermano Isaac que esta quedada era al final la excusa para juntar a “mucha buena gente” convocada por el mejor anfitrión que podían tener, quien seguro que desde el cielo sonrió cuando su hermano entregó por fin el trofeo al doctor Luis Arcas.
Abel llevaba tiempo diciéndolo, no podía ser que su buen amigo Luis Arcas no tuviera a estas alturas uno de los trofeos con los que premiaban a compañeros del equipo. “Casi todos tenemos un trofeo menos él, vamos a dárselo”, había comentado últimamente. La vida quiso que injustamente él no se lo pudiera entregar en persona, pero lo hizo su otra mitad, su hermano Isaac, en un acto muy emotivo. “Fue muy emocional, él está muy afectado, me dijo que mi hermano le hizo muy feliz”. Como le hizo a tantísima gente a la que alegraba sus días con su risa contagiosa.
El vídeo que le dedicaron sus amigos durante el homenaje daba fe de esa buena energía que le acompañaba siempre. Fue un momento para llorarle, porque te has llevado un trocito del corazón de todos, pero también para volver a reír al recordar los momentos vividos y lo afortunado que hemos sido todos de tenerte en nuestras vidas.
