El seleccionador español, Luis Enrique Martínez, defendió este viernes la decisión de no tomar una decisión sobre su futuro
El seleccionador español, Luis Enrique Martínez, defendió este viernes la decisión de no tomar una decisión sobre su futuro con el combinado nacional hasta después del Mundial de Qatar, si bien precisó que actualmente "está en la gloria".
En la rueda de prensa previa al encuentro amistoso que su equipo disputará este sábado contra Albania en el RCDE Stadium, el preparador asturiano no dio pistas sobre su renovación, pero dejó claro que se siente muy respaldado por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
"Estoy en la gloria. Lo de no renovar lo he hecho por vosotros (los periodistas). Como no voy a tener contrato, si las cosas salen mal en el Mundial ya no tendréis que pedir que me echen", dijo entre risas.
En este sentido, Luis Enrique insistió en que en la selección es su "casa" y elogió a la federación por la confianza que le ha dado en los últimos cuatro años: "Me ficharon dos veces y eso es una cosa que no olvidaré nunca".
Afronta el seleccionador el próximo Mundial de Qatar con el objetivo de "competir" y "luchar" con los mejores equipos del mundo y, por ello, le dio máxima importancia a los próximos dos amistosos contra Albania, en Cataluña, e Islandia, en Galicia.
"Es un amistoso para los demás, pero para nosotros es importante", recalcó Luis Enrique, quien consideró que el encuentro contra Albania es una "prueba ideal para ver cómo solventamos la papeleta contra un rival que se va a cerrar".
El partido contra el combinado albanés significará el regreso de la selección española a Cataluña dieciocho años después, una "efeméride" que, según Luis Enrique, "será una fiesta" de algo que espera que sea "común y normal" con vistas al futuro.
El primer partido en 18 años de España en Cataluña llega, según el seleccionador español, en un momento "de crecimiento total" con un "compendio de gente joven y veterana que puede competir a alto nivel", recordó.
Por último, Luis Enrique se refirió a la decisión de instalar una pantalla gigante en el campo de entrenamiento para analizar elementos tácticos junto a sus pupilos.
"Esto es cómo el andamio de viejo. Se lo he visto a entrenadores alemanes desde hace dos años. A los jugadores les ha encantado. Nos permite meter vídeo con calidad. Lo único que me ha dado bajón es que en el hotel hay una pantalla de 25 metros más grande que la nuestra", concluyó.