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Campo de Gibraltar

La primera embarcación de narcos semisumergible incautada en España llega a San Roque

Han sido detenidas 52 personas en una macrooperación contra una importante organización internacional dedicada a producir, adulterar y distribuir drogas

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  • El PP se queja de que la presentación de haga en el Campo de Gibraltar

La Policía Nacional se ha incautado en Málaga de una embarcación semisumergible con capacidad para transportar hasta dos toneladas de droga, en una macrooperación en la que han sido detenidas 52 personas e intervenidos 2.900 kilos de cocaína y 700 de hachís.

El comisario general de Policía Judicial, Rafael Pérez, ha explicado en rueda de prensa en San Roque (Cádiz) que el narcosubmarino, fabricado de forma artesanal y con unas dimensiones de nueve metros de eslora, tres de manga y tres de calado, fue localizado en una nave industrial.

Aún no estaba acabado y, según las pesquisas, iba a ser usado para hacerse a la mar hasta encontrarse con una nave nodriza, de la que tomaría un cargamento de cocaína para luego trasladarlo a las costas españolas.
 

 

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En esta macro-peración, denominada FERRO, han participado a lo largo de más de un año de investigaciones más de 300 policías nacionales españoles de distintas provincias y agentes de Colombia, Holanda, Portugal, Reino Unido y de EEUU, coordinados por Europol.

La investigación, tutelada por la Fiscalía y el Juzgado de Instrucción 3 de Tarragona, dio comienzo cuando se detectó a unas empresas españolas con sede en Cataluña que, bajo apariencia de legalidad, iban a introducir cocaína en España camuflada con productos legales que importaban desde Sudamérica.

Entre abril y diciembre del 2020 fueron intervenidos en Colombia en cuatro operaciones 2.900 kilos de estupefaciente oculto y disuelto en sustrato de coco, torta del palmiste y yeso agrícola, una mercancía que iba ser trasladada a España, a través del Reino Unido y Bélgica.

Días antes a estas incautaciones, fue interceptado un camión en Lisboa (Portugal), con destino al Reino Unido, que transportaba bañeras de hidromasaje, cien kilos de hachís y cien kilos de marihuana.

Las pesquisas se enfocaron después en España y se llevaron a cabo en cuatro fases, durante las que han sido intervenidos más de 400 kilos de cocaína, 700 kilos de hachís, más de 100.000 euros en efectivo, cuatro vehículos de alta gama, relojes de lujo, se han bloqueado cuatro cuentas bancarias y un inmueble y se han desmantelado en Cataluña varios laboratorios clandestinos, uno de ellos con capacidad para producir 750 kilos de cocaína mensuales.

En noviembre del 2020, los agentes localizaron los domicilios de los principales miembros de la organización en Tarragona, y de forma simultánea detuvieron a trece personas, entre ellos el principal investigado, y realizaron seis registros.

En ese momento los agentes localizaron una "cocina" para manipular la droga, en una vivienda donde incautaron 15 kilos de clorhidrato de cocaína listos para su distribución al por mayor, así como 60 kilos de cocaína junto a diferentes sustancias químicas.

El pasado febrero los agentes detectaron otra rama de la organización asentada en la Costa del Sol y que se dedicaba al tráfico de hachís a través del Estrecho de Gibraltar.

Se interceptó un envío de 583 kilos hachís con destino a Francia e Italia en un peaje de Salou (Tarragona), donde fueron detenidas cuatro personas en un dispositivo en el que se realizaron cinco registros.

En uno de ellos, en una nave de Málaga, fue localizada la embarcación semisumergible.

Según la Policía, es la primera con esas características localizada en España.

Para su construcción han utilizando una quilla sobre la que se ha montado una estructura con paneles de contrachapado y fibra de vidrio para dar resistencia a la estructura.

Contaba con dos motores de 200 CV cada uno que serían controlados desde una consola interior, aunque la nave aún no tenía las instalaciones eléctricas.

En el mismo mes, los agentes supieron que uno de los principales investigados se encontraba en el Aeropuerto de El Prat para desplazarse a Holanda, por lo que aceleraron su detención antes de que abandonara el país.

En otro registro en una nave en el municipio barcelonés de San Vicente de Castellet, se intervinieron 21 kilos de cocaína y 2.200 sacos que arrojaron un peso total de 22 toneladas de sustrato de coco impregnado con más de 300 kilos de cocaína.

Cuando la Policía registraba esta nave, acudieron tres hombres de de origen dominicano, que fueron detenidos por su presunta vinculación con la organización.

En otra nave en Barcelona fue localizado otro laboratorio clandestino dedicado a la extracción, producción y adulteración de cocaína y drogas de síntesis.

Allí se hallaron 12.000 litros de precursores almacenados para el procesamiento de cocaína, lo que, según la Policía, podía hacer tuvieran una producción aproximada de 750 kilos mensuales de esta sustancia.

Los investigadores creen que la organización utilizaba como fuente de financiación para operaciones más grandes de introducción de cocaína, la venta de hachís y de la producción de una plantación de marihuana que hallaron en una nave anexa al laboratorio con unas 1.154 plantas.

Las pesquisas llevaron a localizar en otra nave en Totana (Murcia) una lancha de fibra de vidrio de 15 metros de eslora y 4 motores de 350 CV, valorada en más de 300.000 euros, con 7.000 litros de gasolina envasados en garrafas.

A finales de febrero, en la cuarta y última fase de explotación de la investigación, los agentes realizaron 24 registros en Tarragona, Barcelona, Castellón, Valencia, Murcia, Málaga, Cádiz, Granada y Badajoz y detuvieron a otras 21 personas.

Fueron incautados 6.000 litros de precursores que presuntamente iban a ser destinados a la instalación de otro laboratorio clandestino de cocaína en la zona de Murcia, así como dinero y numerosa documentación relacionada con los envíos de cocaína desde Colombia hasta España, que también se hacía a través de cajas de piña contaminadas con cocaína, desde la República Dominicana.

En total han sido detenidas 52 personas, de las que 30 han ingresado ya en prisión, y se han practicado 47 registros en Tarragona, Barcelona, Girona, Málaga, Castellón, Valencia, Murcia, Cádiz, Granada y Badajoz.

Quejas del PP

El senador del PP de la provincia de Cádiz, José Ignacio Landaluce, ha mostrado su "más absoluto rechazo" a la decisión adoptada por el Ministerio del Interior de trasladar hasta el Campo de Gibraltar "la puesta en escena de la operación contra el narcotráfico desarrollada en la provincia de Málaga y que ha tenido entre sus efectos la incautación del primer submarino dedicado al tráfico de estupefacientes construido en España", al considerar que "perjudica" la imagen de la comarca.

En una nota, Landaluce ha considerado "absolutamente inadmisible que el Gobierno de España sea capaz de orquestar un show mediático que no nos corresponde". "Demasiado padecimiento hay en esta comarca con el tema del narcotráfico para que encima, quienes tienen que velar por nuestra seguridad, decidan que responsables policiales se desplacen hasta San Roque para dar cuenta de la intervención, algo que ni nos va ni nos viene, pero que hará que el Campo de Gibraltar vuelva a copar titulares negativos en los medios de comunicación nacionales", ha añadido.

El senador del PP ha mostrado su "más absoluto reconocimiento" a la labor diaria que desarrollan los integrantes de las Fuerzas de Seguridad del Estado, de las policías locales, del Servicio de Vigilancia Aduanera, de la Judicatura y de la Fiscalía, "para quien el PP sigue pidiendo mejores laborales y profesionales, que deberían estar contempladas en la declaración de la comarca como zona de especial singularidad, pero una vez más, el Gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias sigue negando el pan y la sal al Campo de Gibraltar".

"Pero por lo que nunca vamos a transigir es por el hecho de que sigan manchando el buen nombre de una de las zonas de mayor potencial tanto de Andalucía como de España", ha manifestado Landaluce.

A juicio del senador del PP y alcalde de Algeciras, "si la incautación de ese sumergible ha tenido lugar en la Costa del Sol es allí donde los mandos policiales han de comparecer ante la prensa, por mucho que la operación haya podido tener alguna ramificación en esta zona".

"Hemos de luchar por dar una imagen positiva que genere desarrollo económico y empleo para esta tierra, algo que estamos muy lejos de conseguir con acciones tan arbitrarias y sin sentido como es ésta que nos ocupa", ha concluido.

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