A las once y media de la mañana de este miércoles, una treintena de trabajadores de la empresa de hospitales José Manuel Pascual Pascual, convocados por sus comités de empresa, iniciaron una nueva protesta en la sede de la Delegación Territorial de la Consejería de Igualdad, Salud y Bienestar Social de la Junta en Cádiz. Como ya había ocurrido anteriormente, los trabajadores de Pascual se encadenaron a las puertas de la sede de la Delegación con el objetivo de “clausurarla por segunda vez”.
La protesta, entre cuyos objetivos está la demanda de renovación del concierto entre el Servicio Andaluz de Salud, SAS, y los centros privados de Pascual, transcurrió sin incidentes aunque hasta la zona se desplazó una dotación con cinco agentes de la Policía Nacional. Otro de los objetivos de la protesta, quizás el principal ayer, fue denunciar las listas de espera del SAS, así como la pérdida de empleo en los hospitales de Pascual al no derivarle la Junta de Andalucía pacientes. También se denunció la política de recortes llevada a cabo por la Junta en sanidad. De hecho, el lema de esta protesta era ‘Las listas de espera nos encadenan a la enfermedad’.
En este sentido, el presidente del Comité Intercentros de la empresa Pascual, José María Manzano, señalaba a este medio que “venimos a esta Delegación a clausurarla porque no sirve para nada, porque no da servicio a los gaditanos”, ya que “los gaditanos languidecen en las listas de espera”. Manzano indicó que “queremos que esos pacientes sean atendidos, que vengan a nuestros centros hospitalarios y así se deje también de perder empleo”.
José María Manzano explicó igualmente que “reclamamos que esa lista de espera vuelva a nuestros hospitales”, aunque “sabemos que la consejera María José Sánchez Rubio es prisionera de los recortes, porque lo hace la Junta es recortar y recortar, y también mentir y mentir”, y es que “Sánchez Rubio insiste en que no hay listas de espera pero son muchos los pacientes que están sin intervenir, pendientes de una operación o de un diagnóstico”.
De hecho, “en la campaña que hemos iniciado hace apenas una semana ya contamos con 30 ó 40 casos de pacientes que están fuera de plazo para operarse y para hacerse pruebas diagnósticas, y ya tenemos casos de pacientes que han empeorado y cuya salud corre un riesgo grave”, señala Manzano.
“Y mientras esto ocurre, la Junta sigue sin mandarnos pacientes, de hecho ahora se va a cerrar otra planta del Hospital San Rafael, además de mandar más compañeros a la calle, algo que ocurre con los otros centros de Pascual”, concluye el propio Manzano.
