Desde la Apdha tienen la intención de “visibilizar la injusta situación a la que se enfrentan las personas más afectadas por la crisis-estafa que estamos viviendo”, en referencia a un caso concreto como es el “de una joven de que se sitúa frecuentemente junto a la puerta de un supermercado LIDL en Chiclana de la Frontera, en la zona residencial de Los Gallos, en la Barrosa”.
“Esta joven representa la situación por la que están pasando miles de personas en nuestro país, en el que los recursos públicos puestos a disposición de la ciudadanía son insuficientes y cada vez más escasos debido a las políticas de recortes del gobierno”, afirman desde la delegación gaditana de la asociación.
“Es por esto que la joven ha decidido acudir periódicamente a la puerta del mencionado supermercado, para recibir la solidaridad de las personas que libremente le proporcionan alimentos o algunas monedas”, prosiguen.
“Sin embargo, tanto los trabajadores del LIDL, como la responsable del establecimiento, presionan diariamente a la joven para que abandone el aparcamiento”, por lo que los miembros de la Apdh han tratado de mediar en la situación y conocer las causas que provocan que la empresa esté presionando a esta persona para que abandone el exterior del comercio. Los miembros de la Apdh se han reunido con la responsable del centro, la cual les manifestó que “es una cuestión de imagen que no se corresponde con los intereses de la empresa”.
Por este mismo motivo tampoco han permitido a otras asociaciones que realicen campañas de recogida de alimentos en las proximidades de la puerta del establecimiento. A pesar de exponer la situación de necesidad por la que están pasando estas personas y a tenor de que la mendicidad no es ilegal, la responsable “rechaza la posibilidad de permitir la estancia de esta persona en la zona”.
Por lo tanto, desde la Apdh manifiestan su rechazo a estas actitudes que “censuran la solidaridad, a estas políticas comerciales que rechazan la posibilidad de que los clientes se comporten de forma solidaria más allá de las compras en su establecimiento. En unas fechas cargadas de simbolismo, son siempre los más desfavorecidos los que sufren las consecuencias de los sistemas de poder que a todos los niveles van mermando las oportunidades de los que carecen de privilegios y recursos”.