Lo intentó la responsable de Economía y Hacienda del Gobierno local, Maite González, pero fue en vano. PSOE y Adelante Izquierda Gaditana votaron no a la aprobación de los Presupuestos municipales para 2025 pese a que la portavoz del PP advirtió de que su rechazo “era paradójico” de acuerdo a las bondades de las cuentas presentadas. González reiteró las principales ideas con las que los populares han defendido el documento. En primer lugar, remarcó que el gasto destinado a “la protección social de los gaditanos” experimenta una subida del 13% con respecto a 2024 y un 30% respecto al último presupuesto de José María González, Kichi, con 23,3 millones para el área. Ayuda a Domicilio, que dispone de 9,4 millones, casi un 140% más que en 2022 para mejorar la cobertura de los usuarios y acabar con la precariedad laboral de la plantilla, sostuvo, así como la atención a las personas sin hogar, ofreciendo a las entidades que trabajan con el colectivo el triple de fondos, 600.000 euros, en relación a lo recibido en el anterior mandato, dan buena cuenta de la apuesta del equipo de Gobierno. Además, recordó que se recuperan los talleres para mayores. Todo ello, con 13,5 millones para inversiones gracias a la reducción de la deuda bancari, refuerzo en mantenimiento urbano y parques y jardines, así como la financiación de 106 viviendas, de las que el 86% son para alquiler social, con once millones de Procasa.
La oposición rebatió los datos. Pero, sobre todo, el trasfondo político de las cuentas. David de la Cruz, por Adelante Izquierda Gaditana, insistió en su negativa a la venta del Campo de las Balas. “Ni por acción de ni por omisión vamos a ser cómplices de la venta del suelo público”, remarcó, para, a continuación tachar de “antisociales” los Presupuestos porque “lo que hace es darle un pastizal de dinero a la empresa privada que lleva Ayudas a Domicilio, pero no solventa la situación” del servicio, “ni mejora las condiciones de las trabajadoras sociales”. Finalmente, criticó con dureza que se gaste un millón de euros “en la chatarra” de la Pérgola de Santa Bárbara, “un capricho del alcalde”, en lugar de hacerlo en adecentamiento de colegios, transporte público o alumbrado. “No sólo estamos en contra, también estamos orgullosos de decir no a estos presupuestos del derroche”, remachó.
El PSOE coincidió con estos argumentos en términos generales, pero su portavoz, Óscar Torres, puso el acento, dirigiéndose a Bruno García, en que el voto en contra se debe a que “no nos fiamos de usted, no es de palabra”, al recordar que de las trece propuestas socialistas incluidas en los Presupuestos de 2024 por 3,5 millones solo han sido ejecutadas cuatro.
El primer edil intervino para lamentar “el frentismo de la oposición” y su negativa a un modelo de ciudad en la que caben sus planteamientos. También les afeó que durante ocho años “no hicieran nada de lo que defienden ahora”. Y concluyó celebrando la aprobación gracias a la mayoría absoluta del PP de “un presupuesto de progreso y que mira a las personas”.