Finalmente será la consultora Ernst & Young Abogados, perteneciente a EY, la encargada de llevar a buen puerto el concurso voluntario de acreedores, solicitado por el actual consejo de administración de la matriz de Abengoa tras la ruptura del acuerdo entre la empresa y los grandes acreedores, como el Banco Santander, el pasado 22 de febrero.
Así lo ha comunicado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que realizó la preselección inicial de empresas interesadas en hacerse cargo de este ardúo trabajo.
Hay que recordar que Abengoa tiene una deuda de alrededor de 6.000 millones de euros, por lo que se trata de la mayor suspensión de pagos de una empresa española desde la recesión que provocó la gran crisis de 2008.
Y esta cifra es según las cuentas sin auditar de 2019, publicadas recientemente, ya que la empresa aún no ha presentado las de 2020.
Mucho interés
El concurso voluntario de Abengoa despertó mucho interés por parte de las empresas dedicadas a este tipo de operaciones.
Así, el presidente de la CNMV, Rodrigo Buenaventura, llegó a asegurar que se habían recibido unas 45 solicitudes para encargarse de la administración concursal de Abengoa, lo que suponía una cifra "récord" en la historia de la administración concursal de España.
Algo comprensible si se tiene en cuenta que la compañía elegida, en este caso Ernst & Young Abogados, puede embolsarse en torno a dos millones de euros por su participación, según la información disponible actualmente.
Todo hacía apuntar que sería Ernst & Young Abogados la que se hiciera con esta labor. De las cuatro grandes de este sector era la única que tiene una relación directa con Abengoa. Deloitte ya auditó sus cuentas y Pricewaterhousecoopers es la actual auditora de la multinacional andaluza.
Finalmente, KPMG también fue contratada por la multinacional para valorar parte de sus activos.