El Recreativo-Cartagena se está convirtiendo en un clásico del grupo IV. Ojala sea por poco tiempo y ambos equipos tengan la suerte de competir en una categoría superior dentro de poco tiempo. Pero el histórico en estas últimas campañas desde el descenso del Recre ha sido de partidos de altísima tensión, polémica y de momento, la imposibilidad de ganarles como locales. De los cuatro enfrentamientos en 2ªB en el Nuevo Colombino, los murcianos han conseguido dos victorias y dos empates. Hay que tener en cuenta que el Decano de las primeras temporadas en esta categoría de bronce era prácticamente un “zombie” que sobrevivía a durísimas penas por la inacción de Pablo Comas y la acumulación de deudas, algo que al menos esta temporada, tras la inyección económica del consistorio el pasado diciembre, parece solventado.
Además de eso, el partido trae consigo sentimientos encontrados entre jugadores que han estado en ambos bandos. Mientras el Recre se ha nutrido de exjugadores del Cartagena como Óscar Ramírez, Sergio Jiménez, Quique Rivero o Rubén Cruz, en las filas del rival está nuestro conocido Marc Martínez, que de momento es el menos goleado de la categoría y con una buena tasa de minutos acumulados imbatido. Eso es debido en gran parte al estilo defensivo que Munúa ha implantado, otro motivo que se contrarresta con el del Recre, ya que Monteagudo es mucho más ofensivo. Será un partido bonito por todo lo que significa: luchar contra el líder y posiblemente, y con permiso de un Córdoba y Murcia heridos económicamente, el rival con más entidad de la categoría. Los dos extremos del sur de España cara a cara.
Si nos paramos a mirarnos el ombligo, el Recreativo viene de un mal partido ante el Marbella: desconectados y dominados, pero aún así, y aunque sea en última instancia, anotando gol. Y es que este Recre marca siempre, aunque a veces está costando mucho más de lo previsto conseguirlo. Seguimos con el expediente X de Quique Rivero, el que debería de mover las manijas en el centro del campo, que continua de baja tras la durísima entrada recibida ante el UCAM Murcia, pero continuamos ganando jugadores ofensivos como Irizo o Rubén Cruz, que poco a poco mejoran su estado de forma y aumentan, aún más, la capacidad goleadora del equipo. En cualquier caso, me parece motivo de alegría recuperar a Diego Jiménez que ahora mismo es el jeque de la zaga y un indispensable en mi opinión.
Ni qué decir la importancia moral y clasificatoria que tendría esta victoria, y más ahora que vienen dos partidos seguidos de nuestro equipo como local y hay que intentar sumar todo. ¡Nos viene un domingo entretenido!