La presidenta de Diputación, Irene García, ha defendido en la tarde de este viernes el papel de la función pública como medio para conseguir unas instituciones “más cercanas a la ciudadanía, más eficientes y que se consoliden como motor de desarrollo de los cambios que necesita la provincia de Cádiz”. Esta reflexión forma parte de su intervención en el octavo congreso provincial de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) que se celebra esta tarde en Cádiz.
Irene García ha adoptado el lema “Sumando” -elegido por la citada organización sindical para la celebración de su congreso- para “hacer provincia entre todos”, cada uno desde la esfera de su competencia y en el ámbito de sus responsabilidades. En el caso de Diputación, la administración provincial cuenta con una plantilla de 1.435 profesionales entre funcionarios, personal laboral y eventuales, que “son nuestros ojos, nuestras manos y nuestra voz”, y que personifican la capacidad transformadora que requiere la provincia de Cádiz en sintonía “con los agentes económicos y sociales”.
Esa capacidad transformadora, según indicó Irene García, debe plasmarse en la mejora de los servicios públicos sometidos a constante renovación en busca de la calidad que demanda la ciudadanía.
En el congreso provincial de CSIF han participado 80 compromisarios en representación de nueve sectores: enseñanza, sanidad, justicia, administración del Estado, administración local, administración de la Junta de Andalucía, Universidad, Correos y empresas privadas. Este foro ha renovado su comité ejecutivo provincial.
Junto a Irene García ha comparecido en este acto el subdelegado del Gobierno, Javier de Torre; el responsable del área de Función Pública de Diputación, Fran González; así como Miguel Borra, José Luis Heredia y María José Cano como titulares estatal, regional y provincial del sindicato CSIF.
