Los barrios de Ronda se han llenado de obras. Puede usted pasearse por cualquiera de ellos y ver que se ha entrado, de pronto, en una llamativa hiperactividad de arreglo de acerados, pintura y remozado de las distintas calles y plazas rondeñas.
Llama la atención la llegada de esta lluvia de trabajos, que lo cierto es que se había echado en falta en los últimos tres años. Era una necesidad el realizar labores de mantenimiento en las calles, ya que, poco a poco, se estaban deteriorando. Los ciudadanos valoramos de forma especial el poder disfrutar de barrios que se encuentren en buen estado de revista.
La alcaldesa se ha dado cuenta que este tipo de gestiones son importantes para los ciudadanos y se ha puesto manos a la obra. Ahora, encontramos a gente trabajando por todas partes, llegando a parecer que la crisis económica ha terminado y que entramos en una nueva etapa.
El arreglo de la Avenida de Málaga, la nueva biblioteca comarcal y este plan de “reestreno de los barrios” son sin duda alguna los principales proyectos realizados por el actual equipo de gobierno local. Atrás quedan aquellos tiempos en los que se hacía política de grandes promesas y de proyectos impactantes que según algunos hacían que se ganarán las elecciones. La situación económica obliga a hacer una política mucho más doméstica y cercana al ciudadano. Al final lo que realmente preocupa a los rondeños es su día a día y la calidad de vida que tenemos.
Creo que es positivo el centrarse en las pequeñas cosas para después ir avanzando en asuntos más estratégicos.
No hay duda de que los políticos se han puesto las pilas ante la próxima campaña electoral. Las ruedas de prensa y comparecencias públicas se han multiplicado esta semana por la necesidad de nuestros munícipes de vender al ciudadano una imagen de trabajo y responsabilidad de cada a los próximos comicios. Lo bueno de todo esto es que al menos una vez cada cuatro años las cosas se agilizan y parece que todo empieza a funcionar.
Bienvenidas sean las obras y todas las nuevas iniciativas, aunque se pueda pensar que son electoralistas.