Estos jugadores parecían el sábado de otra galaxia. 2012 no ha podido empezar de mejor forma para el conjunto de Álvaro Cervera y para la afición onubense que disfrutó de lo lindo en las gradas del Nuevo Colombino, viendo como el Decano se paseaba por el terreno de juego ante un Girona que deberá mejorar en las próximas semanas si no quiere verse inmerso en el pozo de la Segunda División B.
El Decano comenzó el partido con la misma alineación que se enfrentó al Villarreal B, exceptuando, la entrada de Pablo Sánchez por Asen. El encuentro en sí, fue, en todo momento, del Recreativo de Huelva que no dio tregua a un herido rival con muchas carencias tanto en defensa como en ataque. Desde los primeros compases de partido, el equipo onubense salió al ataque en busca del primer gol, algo que en anteriores citas no había sucedido. Y llegó. Los locales se pusieron por delante pasados diez minutos tras un auténtico golazo de Javi Álamo que realizó un partido muy completo, desbordando por banda cualquier pelota que cogiese y encarando al lateral izquierdo, sin duda, dándole la tarde. Eran de aquellas tardes en la que te sale todo lo que intentas hacer. La tónica del partido siguió de la misma manera, el Recre seguía manteniendo la posesión de balón, mientras que el equipo catalán se las veía y deseaba. Acoso y derribo del Recreativo que buscaba el segundo tanto con ímpetu y gran juego. Llegó en el minuto 30 por mediación de Pablo Sánchez. A raíz del gol, el Nuevo Colombino era una fiesta, aquello parecía la época de Marcelino García Toral cuando derrotaban a los ‘grandes’. Los jugadores se hicieron eco de ello fruto de los ánimos y se comenzaron a gustar en el terreno de juego. Los laterales hacían la cobertura en ataque apoyando a los interiores, no daban ningún pelotazo mal dado, intentaban sacar el balón jugado, trenzaban jugadas... ¡Una maravilla!
La primera llegada de los de Raúl Agné llegó en los minutos finales de la primera mitad con una ocasión en las botas de Verja que, por momentos, era el único que intentaba inquietar la meta de Manu Fernández. Poco más dio de sí la primera mitad.
En el descanso, Juan Villar entró en el terreno de juego en detrimento de Sergi Enrich, que no estuvo fino de cara a la portería rival, pero que realizó una gran labor de desgaste presionando la salida del cuadro del Girona. Tras la reanudación y el resultado favorable en el marcador, Álvaro Cervera regaló la posesión de balón a los visitantes buscando una contra letal que sentenciase el partido. Con más corazón que cabeza, el Girona lo intentaba sin éxito, no estaba la suerte de cara. Los minutos transcurrían y los onubenses a lo suyo. Pero como suele pasar casi siempre en el Nuevo Colombino, los aficionados no tienen un partido medianamente tranquilo y, de ello, se encargó el colegiado Ocón Arráiz expulsando a Matamala por doble tarjeta amarilla. Rápidamente, Álvaro Cervera introdujo en el campo a Borja Granero por Ramón Arcas, que también realizó un gran trabajo en la zona medular cortando los envistes visitantes.
En los minutos finales, Juan Villar marcó el tercero tanto pidiendo perdón al respetable por la acción del anterior partido, mientras que en las gradas se desataba la euforia y que, incluso, comenzaron a hacer la ‘ola’ en ciertos sectores del público. El único pero del encuentro, la expulsión de Matamala por doble tarjeta amarilla y la amonestación a Cifuentes, que acarrea cinco tarjetas amarillas, por lo tanto, ambos serán bajas en la próxima cita en tierras cartagenenses. El gafe de no vencer a ningún equipo cuyo entrenador había pasado por la disciplina onubense anteriormente quedó zanjado tras la victoria al Girona de Raúl Agné. Con esta victoria, el plantel onubense se sitúa en la 12ª posición con 26 puntos y abre una renta de 8 puntos respecto a la zona baja de la clasificación.
Los dos próximos encuentros serán a domicilio, primero, en Cartagena y, posteriormente, en Murcia.