Reconoce que “entre la falta de limpieza, la colaboración del viento y las siempre deplorables actuaciones del incivismo de algunos vecinos, el barrio presenta una imagen cochambrosa”.
Asegura Ruiz que “la desidia municipal en este aspecto de limpieza, añadido a la inoperante e irresponsable gestión llevada a cabo por parte del Ayuntamiento y la Junta de Andalucía en la barriada de La Inmaculada están lapidando los más de 20 años de trabajo que a favor de la transformación urbanística, social y por la buena convivencia vecinal de esta zona viene realizando la asociación de vecinos Palmar de la Victoria”. Admite que, por el camino de la desidia municipal, Palmar de la Victoria “volverá a repetir su lamentable historia, como será el pasar de ser uno de los mejores barrios en participación y convivencia vecinal a convertirse en una zona de chabolismo vertical, marginación y conflictividad social. Las primeras piedras en este lamentable avance han sido colocadas, como queda dicho, por la pésima e irresponsable gestión del Ayuntamiento y la Junta en la barriada de La Inmaculada”.
Por todo ello recuerdan al alcalde, Enrique Moresco, y al concejal de Vivienda, Antonio Jesús Ruiz “que rectificar es de sabios”, ya que sabían “sobradamente, porque bien y reiteradamente se les aconsejó desde Palmar de la Victoria, qué es lo que tenían que hacer para que este enclave de viviendas sociales no llegara a caer en la grave situación de degradación urbanística y social en la que hoy se encuentra. Pero a ello prestaron ojos ciegos y oídos sordos”, sentencia.