Clavelitos, clavelitos, clavelitos de mi corazón… Santa Cecilia, perdona que te tutee y me dirija a ti cantando música de tuna con el atrevimiento propio de un tunante pecador de la pradera. El motivo de estas líneas es doble: por un lado, felicitarte por tu santo, que será este viernes 22 de noviembre y, por otro, rezarte a ver si puedes hacer algo para remediar lo que te voy a exponer a la desesperada. Yo podría haberme ido con la música a otra parte, pero quién mejor que tú para atenderme siendo Patrona de la Música y de los Músicos desde 1584. Los locos sabemos que por la mala traducción de una palabra te pusieronen las estampitas cargando con un órgano y con otros instrumentos musicales, y que tu nombre Cecilia, de origen latino, significa
niña ciega o cieguecilla, pero el oído lo tienes muy fino y sé que me escucharás.
En La Isla hemos despuntado siempre por tener una afición extraordinaria a la música. Son de admirar tantos chavales cañaíllas en sus bandas de música, tantos artistas destacados que le han dado y le siguen dando fama a este rincón. Por lo que respecta al flamenco, baste decir Camarón y la cantidad infinita de flamencos que parió esta ciudad. Sin embargo, Cecilia, nos tenemos que tragar el orgullo que sentimos, porque disponemos de un Conservatorio Elemental de Música, llamado CEM Chelista Ruiz Casaux, también ilustre músico isleño, que da auténtico bochorno en una ciudad como la nuestra que ronda los cien mil habitantes. El pobrecito está metido con calzador en el Centro de Infantil y Primaria Almirante Laulhé. Cuando terminan los pequeños sus clases, se recogen las mesas del comedor, se preparan corriendo otras aulas para dar paso a las clases de música, instrumentos para arriba e instrumentos para abajo. Después toca dejarlo todo tal como estaba. No tiene ni sala de profesores, ni auditorio, ni oficinas propias… Allí se encajó provisionalmente en 1990, hace ya TREINTA Y CUATRO AÑOS y allí sigue. Provisional es lo mismo que transitorio, interino, eventual, accidental, temporal, momentáneo, efímero, circunstancial, pasajero…, es decir, un parche, un remiendo, a la espera de algo definitivo. Cecilia, que no estamos hablando ni de un año, ni de dos, ni de tres, sino de TREINTA Y CUATRO AÑOS de parche.
Y encima, en el manicomio nos hemos enterado de que este Ayuntamiento va a gastarse 11 millones en remodelar el campo de fútbol. Es muy difícil comprenderlo y da vergüenza ajena. Cuando los chavales terminan el Grado Elemental (4 años), se tienen que ir a Cádiz a continuar el Grado Profesional. Muchos, que podrían ser grandes artistas, se aburren, y el desplazamiento continuo a Cádiz supone un castigo para alumnos y padres. Conceder el Grado Profesional depende de la Junta, pero tener un edificio digno de nuestra historia depende del Ayuntamiento. ¿Acaso no hay ningún sitio para un Conservatorio digno? Si hubiera, cabría la posibilidad de que la Junta le añadiera también el Grado Profesional. En caso contrario, imposible. Cecilia, felicidades, pero no llores por esto y haz algo, por favor, porque los años han ido pasando, los distintos partidos en el poder del Ayuntamiento han ido pasando y, si tú también pasas, seguiremos igual. Cualquier día nos colamos los locos en un Pleno con los instrumentos y nos liamos a guitarrazos con el que se ponga por delante. Tú, que amenizas las funciones del cielo con tu música, a ver si ilustras a nuestro silustres gobernantes, porque La Isla se merece otra cosita. Anda, hazlo por ella.
Ay, ay, ay, canta y no llores, porque cantando se alegran, cielito lindo, los corazones. Un abrazo.