El Estado Islámico ha hecho un llamamiento para atacar a los países árabes que están en proceso de normalizar sus relaciones con Israel. Esta proclamación se justifica argumentando que es un método eficaz para liberar “Al-Ándalus”, que actualmente se encuentra bajo el control de los “infieles”.
Estos yihadistas, atrapados en una búsqueda incesante de una estrategia efectiva tras la pérdida sucesiva de sus cuatro “califas”, exceptuando la campaña de exterminio contra los cristianos en África, enfatizan que es fundamental atacar a los gobiernos que normalizan las relaciones con judíos y estadounidenses. En una declaración recogida por el periódico La Razón, mencionaron: “Apuntar a "los normalizadores", es un "paso en el camino correcto hacia la liberación de Jerusalén, La Meca y Andalucía". De acuerdo con su perspectiva, matar a aquellos que normalizan estas relaciones es equivalente a matar a los propios judíos y cristianos.
En este contexto, defienden que los musulmanes deberían rechazar no solo a los sionistas, sino también a todos los judíos, cristianos y, en particular, a aquellos musulmanes que decidan normalizar relaciones con Israel. Dentro de esta lista de "normalizadores", el Estado Islámico incluye a países como los Emiratos Árabes, Arabia Saudita, Turquía y Qatar, además de organizaciones como los talibanes afganos y Al-Qaeda.
