María del Mar López lleva años haciendo tocados. Lo hace de una forma personalizada y artesanal que le ha valido el reconocimiento por parte de amigas y clientas. Ahora, sin embargo, ha dado un nuevo paso para abrir al público Marlogue Tocados, un establecimiento situado en calle Miguel Hernández que abría sus puertas el pasado 13 de julio, y que pretende convertirse en un espacio en el que no solo atender profesionalmente sino también exponer los variados trabajos que viene realizando, siendo, por ello, el mejor escaparate posible de una labor que combina vistosidad y elegancia.
“Ya eran varios años de estar elaborando complementos, pamelas, tocados, tiaras de novia, y todo el mundo me decía lo mismo. ¿Por qué no abres una tienda? Es cierto que no es lo mismo hacer que alguien acuda al salón de tu casa, que poder atenderlo en un establecimiento a pie de calle. Y por ello he terminado decidiéndome a poner en marcha esta tienda”.
El abanico de ocasiones para visitar Marlogue es amplio. “Bodas, bautizos, comuniones, en realidad cualquier evento en que una mujer necesite arreglarse para salir. No tiene que tratarse de ocasiones especiales, sino que ofrecemos complementos para el día a día, como cinturones o incluso mascarillas”.
“En definitiva, lo que pretendemos con la tienda es que haya un sitio en el que puedas tener donde elegir; que una novia pueda llevarse su tiara, a su gusto, y especialmente hecha para ella, tanto en el color, forma, etc. Es decir, lógicamente también ofrecemos artículos ya hechos, pero lo que nos distingue es la personalización para nuestras clientas, ya que todo lo que hay en la tienda está hecho a mano”. Al establecimiento que ahora ha abierto sus puertas en calle Miguel Hernández, número 4, se unen sus espacios en Facebook o Instagram, bajo el nombre de Marlogue Tocados, donde también podremos conocer todo lo que esta verdadera profesional del tocado y el complemento de boda y fiesta puede ofrecernos.