San destacó también que estos trastornos en la edad infantil o juvenil se puede traducir en problemas de marginalidad o de conductas antisociales en la edad adulta y destacó la importancia de contar con un buen diagnóstico.
Lluís San presentó en la jornada de ayer en el Hospital Sant Joan de Déu la Encuesta de Salud de Cataluña, que fue elaborada por el Observatorio de la Infancia y de la Adolescencia Faros, integrado además por los hospitales Clínico de Barcelona, Clínica Universitaria de Pamplona y Gregorio Marañón de Madrid.
Esta encuesta, cuyos resultados son extrapolables al conjunto de España, según sus promotores, revela que un porcentaje del 9% de los niños catalanes y el 4% en el caso concreto de las niñas tienen trastornos de comportamiento graves que requieren una intervención psiquiátrica para evitar problemas mayores en la edad adulta.